"Se pueden arreglar campeonatos enteros, como el de Boca de Ischia." Javier Ruiz árbitro "Ehhehh, eh yo pienso de que ehhehh eeeehh (?)." DAP "No estén cagados." Daniel Passarella

domingo, 25 de febrero de 2018

Con la guardia baja y nadie aparece

Mora se creó espacios a puro coraje

Terrible derrota en Velez (la sexta consecutiva de visitante, sucediendo algo que no se veía en los últimos 78 años). No es el resultado (1 a 0) lo nefasto sino la situación. Un partido en el que nada sale bien, no acompaña la suerte (tiros en el travesaño), ni los árbitros (no expulsó a Cubero y en la siguiente expulsa a Perez), ni los dirigentes (D´onofrio saliendo a defender a Macri y dejando solos al cuerpo técnico, jugadores e hinchas), ni el técnico (sigue sin encontrar el camino que nos saque de este pozo), ni los jugadores (cada vez más desanimados y con menos capacidad de reacción) y cada vez nos hundimos peligrosamente más hondo).

Es asombroso como una dirigencia y un cuerpo técnico que han acertado y demostrado capacidad e idoneidad en ciertos temas, hayan errado y demostrado incapacidad en el armado de un nuevo plantel luego de haber desarmado / destruído un plantel campeón. Este es un plantel con cierta calidad individual en sus jugadores y cuerpo técnico (hasta podríamos incluir a los hinchas y dirigentes en esta categoría) pero que aún no dio un paso para convertirse en un equipo; le falta todo. No demuestran nada como equipo, no hay sociedades, no hay rebeldía para reaccionar, no hay espíritu competitivo ni dentro ni afuera del plantel, están muy tranquilos, muy conformes y cuando la realidad los golpea ya es demasiado tarde para reaccionar porque por más que quieren no saben como. Está todo tan mal que no se sabe si hay que hacer un lavado de cabeza, darles algunas fechas de banco, hacerlos trabajar en cuádruple turno, dejar que juegue la reserva (?), bajarles los premios...

El plantel campeón de América era duro y seguro, no se les hacía goles y trabajaban para convertir, llegaban al gol y sabían cerrar la puerta. Este plantel es débil e inseguro desde lo anímico, nos hacen goles por errores tontos y no tenemos idea como llegar al otro arco. Este River Plate lastima porque ha demostrado una gran generosidad en levantar a cualquier rival destruído para hundirnos más a nosotros, lastima por su falta de reacción. River Plate hoy no tiene un jugador que rompa los esquemas defensivos rivales porque nadie (salvo Martinez) se anima a eludir jugadores y nadie entiende aún al colombiano Quintero (el único en dar pases cortados ante los movimientos de los delanteros), no hay un jugador que juegue por las bandas tanto en defensa como ataque (Fernandez está bajísimo, Rojas estaba igual y encima se lesionó, Moreira a veces lo hacía pero nadie sabe que pasó, Perez no tiene resto físico para correr y está muy abajo sin lastimar (algo similar que Quintero), el equipo es muy largo porque nadie sabe salir y cuando llegan al fondo por las bandas terminan volviendo casi hasta nuestro arquero; queremos jugar con los laterales pero nos encerramos contra el lateral sin que haya un jugador que se acerque (por eso volvemos siempre hacia atrás), nadie cambia los ritmos, los mediocampistas están desanimados y deambulan como zombies en lugar de buscar los espacios, la desconfianza los convirtió en jugadores patéticos, sin ideas y sin ganas; inofensivo y desordenado, no defiende ni ataca, ya no sabe si presionar, esperar o jugar porque no sabe como se hacen estas cosas. Un plantel donde ni siquiera puede llegar un jugador de inferiores (quiero que alguien explique que les hicieron a las inferiores; como puede ser que no salga un jugador. Hace años que no se forma un jugador con proyección. D´onofrio debería dar explicaciones al respecto).
Pratto aún mostró muy poco

Un gran equipo se transforma luego de que el plantel se une por el aprendizaje de los golpes que van recibiendo o porque la personalidad de los jugadores los une en un objetivo. Este plantel ya demostró que le falta personalidad y tuvo suficientes golpes como para reaccionar. Esto lo convierte en preocupante. Un equipo que ya debería conocer el camino, aún no ha dado el primer paso y ni siquiera sabe hacia donde darlo. La derrota ante Lanús, el doping, la ida de varios jugadores en momentos inoportunos, la llegada de jugadores que debieran haber dado soluciones y solo empeoraron el presente y aumentaron los interrogantes... todo esto nos deja en la mayor penumbra e incertidumbre... dónde estamos (desde lo deportivo, institucional, político y económico)? hacia dónde vamos? y cómo se sale?

Gallardo volvió a intentar poner un equipo mixto (ante tantos bajos rendimientos uno empieza a preguntarse si era un equipo de suplentes y titulares o solo fue la búsqueda de un equipo) ante la proximidad del partido ante Flamengo. Armani vuelve a demostrar que era el arquero que se necesitaba (junto a Alario fueron las 2 únicas incorporaciones acertadas hasta ahora de esta gestión), seguro, rápido, sabe lo que debe hacer y tiene personalidad (todo lo que le falta al resto del plantel). En la defensa no tienen idea donde pararse, como cubrir las espaldas, donde poner el pie, llegan a destiempo... es sorprendente en jugadores de esta calidad... inexplicable. Mayada y Casco subieron mal, marcaron mal y fueron mal acompañados por Martinez Quarta y Pinola. La defensa no es salida con la pelota y no tiene marca, o sea...
Scocco intentando definir...

En el mediocampo la situación fue peor (si, peor). Zucculini mal parado llegaba tarde a todas (se salvó de la expulsión) y junto a Perez, Palacios y De la Cruz nunca supieron que hacer. Los otros 3 demostraron lo que es jugar desmotivados (encima Enzo fue expulsado a mitad del segundo tiempo), no solo llegaban tarde por estar mal ubicados sino por no moverse, por dejar que pasaran los rivales mientras ellos los veían pasar. En estos tiempos no se puede dejar que el rival corra y uno empezar a correr cuando ve que lo pasaron como poste caído. Palacios no siente la marca y De la Cruz no sabe para que está en la cancha (cuando entró Mora empezó a correr en ataque y se contagió con algo de sangre). Qué se puede esperar de los atacantes? Nunca les llega la pelota y obviamente no la tocan. Ni Pratto ni Scocco pueden estar cómodos con este juego. Ponzio entró por Zucculini (previendo una posible expulsión) y no pudo transmitir nada (incluso en el gol se durmió). Mora entró en el ataque y logró que el equipo reaccionara (tarde y solo con espíritu) y Quintero le agregó algunas ideas.

Estamos mal, estamos en crisis, estamos sin respuestas... y ya no queda mucho tiempo.

Por Charro.

lunes, 19 de febrero de 2018

AFAno en el Monumental. Vinieron a cagarnos...

Los goleadores en el empate (atraco) ante Godoy Cruz en el Monumental

Creo que desde el arbitraje de Lousteau en la bostanera que no vemos un arbitraje tan descarado y alevosamente delictivo. Muchos árbitros son especialistas en inclinar la cancha, suelen ser sutiles y cuando no alcanza cometen algún ¨error¨ decisivo pero discutible, saben a que equipo deben darle tiros libres cerca de las áreas, saben a que jugador amonestar rápidamente, a quien deben permitir que le peguen más de la cuenta, permitir que los jugadores se tiren al piso y no se levanten o que los arqueros tarden en sacar, adicionar menos de lo que se debe... los métodos son muchos y suelen estar apoyados por los ¨periodistas¨ coimeros de los grandes medios. A estos arbitrajes manipuladores se suman los torpes que necesitan hacer algo escandaloso y quedar en evidencia para beneficiar a un equipo pero hay arbitrajes que sobrepasan estas categorías y a mi parecer son simplemente mensajes que vienen de arriba para disciplinar y dejarle en claro a todos los actores quien es el que manda y que se hará. Tanto aquel arbitraje en la bostanera como este (al que habría que sumar el de la bosta con CASLA de unas semanas), son claros mensajes de que se actuará con impunidad a favor de uno y en contra de algunos. Así como en aquella época todos sabían sobre la pelea de Grondona y DAP y se veían los arbitrajes que perjudicaban, en aquella oportunidad fue muy alevoso y estoy seguro que fue intencionalmente. De la misma forma, en esta ocasión todos saben que hay un beneficiado pero hay un mensaje que Angelici, Tapia y/o Macri quisieron dar (probablemente para el partido por la supercopa). En aquella ocasión no se cobraron 6 penales (uno tan claro que nadie pudo explicar porqué no se cobró), en esta ocasión hubo un penal clarísimo, una posición adelantada evidente, una expulsión que ni siquiera era necesaria verla, inventó un tiro libre casi en el área chica, no adicionó tiempo a pesar de la alevosía de los jugadores mendocinos, le inventaron una posición adelantada a De la Cruz cuando se iba solo a enfrentar al arquero...).
Siempre junto a la pelota...

Cuando Gallardo habló de la guardia alta, imaginé que le hablaba especialmente a los dirigentes y a sus jugadores, a los primeros les pedía que esten atentos a cualquier avivada y a los segundos que debíamos jugar mucho mejor que los rivales para que los ¨errores¨ que sucederían no afecten la forma de jugar ni los puntos que se obtendrían. Lamentablemente los dirigentes no hicieron mucho en este tema hasta ahora y el equipo no aparece. Lo que más me preocupa es como inciden estos mensajes en la mentalidad de los jugadores, así como aquella vez el equipo se cayó anímicamente, espero que esta vez el equipo se una y entienda que debe jugar en inferioridad númerica, que tendrá que hacer varios goles más que el rival para no sufrir las injusticias. Para estos casos solo hay 2 reacciones, caerse ante la arbitrariedad y sentirse frustrados o intentar fortalecerse y no dar chances a que les ganen (se perderán algunos puntos injustos pero se debe seguir sumando).

Ayer el equipo tuvo un pésimo primer tiempo más allá de un penal demasiado claro no cobrado y de un gol rival en clara posición adelantada. Así y todo se terminó perdiendo 2 a 1 ese primer tiempo y al inicio del segundo se logró empatar. Como dijo Gallardo, era un partido que se presentó como para perder por mucho y se terminó empatando, se jugó muy mal pero se terminó empujando con ímpetu. El equipo no encuntra juego, no encuentra intérpretes porque la mayoría está en un pésimo nivel y los errores de unos no son salvados por otros. Dependemos de inspiraciones individuales porque el equipo no funciona. Se busca por los laterales pero quedan muchos huecos en defensa y nadie desborda, razón por la cual la pelota siempre vuelve hacia atrás. Las defensas rivales son bloques que no son penetrados. Faltan las sociedades y falta el trabajo en bloque, no alcanza que un jugador vaya a marcar si no es acompañado por el resto, no alcanza con que un jugador se desmarque si la pelota no le llega y no alcanza con mover la pelota de un lado al otro si nadie se anima a pasar a un defensor o patear al arco. River Plate suele tener la pelota pero no patea al arco y a veces ni siquiera genera peligro.
El primer grito de gol, tuvo rebotes y desvío pero era muy importante

Ayer Armani volvió a salvar el partido sin hacer ninguna atajada espectacular (sale rápido y es muy decidido), la defensa no coordina, se mueve alocadamente detrás de los delanteros intentando tapar huecos donde está la pelota pero nadie marca al hombre que viene de atrás. Las espaldas de Saracchi y Montiel son grandes huecos que deben cubrir Maidana y Martinez Quarta. El primero no cometió grandes errores pero el pibe tuvo una pésima tarde (un desastre con la pelota, no dio un pase bien). En el medio Ponzio no se acomodó bien con Zucculini pero en el segundo tiempo impuso su personalidad y el nuevo jugador empezó a animarse un poco más. El que volvió a mostrar mucho de lo que podría hacer es Quintero. No funcionó muy bien la dupla con De la Cruz pero ambos tuvieron excelentes momentos (el colombiano sorprende hasta a sus compañeros con su habilidad y fue fundamental en el primer gol, el uruguayo tuvo un gran desborde en el segundo gol pero chocó mucho). Adelante, Pratto peleó mucho, aún se lo ve muy solo pero le cometieron un penal, con un excelente taco dejó solo a Mora para el primer gol e hizo el segundo y el uruguayo Mora le puso muchas ganas y rebeldía (algo que le falta a muchos) como para cambiar el resultado y no dejarse llevar por la bronca.
La posición adelantada sin ningún jugador que interrumpiera la visión del juez de línea

En síntesis, todos sigue igual. Cambiaron los actores, los protagonistas esta vez fueron Baliño y Massa (un gordo impresentable que no tengo dudas que entró junto al árbitro con la única intención de perjudicar a River Plate, será tarea del periodismo independiente averigual el porqué y desde donde vienen las órdenes), se estrenó una camiseta (al fin los inútiles de Adidas hicieron la tricolor pero son tan inútiles que la espalda la hicieron blanca), se cantó contra Macri (no creo que le preocupe demasiado al presidente, hasta debe sentir cierto orgullo y lamentablemente fueron muy pocos los que privilegiaron su sentimiento por River Plate) pero la realidad es que el equipo sigue sin aparecer y a esta altura es muy preocupante.  

Por Charro.

domingo, 4 de febrero de 2018

Regalo de carnaval... gracias maestro!

Gracias maestro!!!

Cualquier comentario sobre el partido del sábado a la noche (o de medianoche) empezará con la sonrisa y la imagen del segundo gol de Scocco que nos llenó de felicidad a todos los riverplatenses (en estos tiempos modernos hay algunos amantes del fútbol que no se permiten disfrutarlo porque en lugar de ver fútbol ven camisetas). Fue tan maravilloso ese gol que opacó al primer golazo, un tiro libre clavado en el ángulo que dejó al arquero acucliyado (?), sin siquiera el tiempo para estirarse y volar. Ese hermoso gol (muy similar a uno de Messi a Rulli de hace unas semanas) es minimizado por la obra maestra del segundo gol en el cual pasó a varios defensores haciendo un slalom (en un campo de juego vergonzoso) que terminó dejando despatarrado al arquero rival para darle rienda suelta al festejo y a la obra de arte.
Un arquero con experiencia y presencia. Ojalá nos pueda dar todo lo que necesitamos

Ayer llegamos al Monumental en un horario y día extraño. Sábado 21,30 hs. no parece ser el mejor horario y el equipo con su fútbol no invitaba a hacer locuras (?). El primer tiempo pareció dar la razón a los que no quisieron ver más de lo mismo. Armani mostró algo de lo que podrá entregarnos (impone presencia, parece rápido, le gusta jugar con la pierna derecha, está muy atento para salir jugando con el compañero libre para tomar por sorpresa al rival y no se queda atornillado, no le tiene miedo al error), salió en un par de centros (salió con los puños y desactivó una jugada muy peligrosa) y eso fue lo poco que nos mostró el primer tiempo (algo del Pity y Borré peleando para que no le cobren fuera de juego).
Muy interesante jugador. Nos dará lo que nos falta?

El segundo tiempo podría haber sido similar pero hubo algunos hechos que nos dieron un respiro. El golazo de Scocco abrió el partido pero mientras pasaban los minutos (jugando mucho mejor, abriendo la cancha y poniendo mucha presión) todos pensábamos en la cantidad de veces que nos empataban tontamente. Se jugaba mejor pero aún faltaba fútbol... y éste llegó con el ingreso de Pratto y Quintero (muy bajo el nivel de Nacho Fernandez). El colombiano empezó a mostrar lo que puede darle a River Plate, es un jugador que está muy mal físicamente pero que juega mágicamente. Sus compañeros aún no comprendieron la magnitud de su magia, ellos mismos se sorprendían sin saber como aparecía la pelota en sus pies después de un amague o un taco. El colombiano le dio a Gallardo lo que tanto buscaba, algo de fantasía, ideas y fútbol para romper defensas cerradas, pases milimétricos para que entren solos los delanteros o los laterales, apilar defensores para dejar a otro compañero libre... le dio simpleza al juego (e incluso sus compañeros empezaron a imitarlo) y habrá que ver cuanto dura; ayer jugó media hora y los rivales no lo conocen, no le hicieron sentir el rigor, tampoco se anticiparon a su juego (no será fácil) y obviamente no se lo vio ahogado. No sabemos si seguirá sorprendiendo pero mientras tanto es muy interesante y gratificante verlo jugar (aunque da un poco de vergüenza su estado físico). Pratto también aprobó en su debut, se perdió unos goles (especialmente un mano a mano con el arquero y una media vuelta que pegó en el travesaño) pero mostró potencia y participación. El broche de oro fue el ingreso de Mora por Scocco. Una ovación y los más sentidos aplausos para el maestro que salía y para el querido uruguayo que entraba después de mucho tiempo a jugar en el Monumental.
Una carambola casi arma el delirio Monumental

Otra interesante nota de ayer fue la defensa. Pinola sigue tomando confianza (anticipó mucho a los rivales) y Martinez Quarta se mostró seguro y rápido (fundamental a la hora de jugar con Pinola o Maidana) cubriendo muy bien las espaldas de sus compañeros. Montiel corrió mucho y marcó muy bien (me gusta que no solo va por el lateral, también se lo ve mucho cerrándose hacia la media luna del área rival) y Saracchi tiene problemas con la marca pero muchas cosas las soluciona con velocidad e intensidad (por ahora se nota que le gusta ir al ataque y le cuesta no perder en la marca). El gran problema estuvo en el medio. Con Fernandez jugando muy mal (apático) y Perez algo perdido, se le complica a Ponzio (tiene que hacer mucho esfuerzo y desgaste físico) y a Martinez (a la hora de generar fútbol). Ponzio intenta salir jugando y defender en todos lados, Pity está mucho más participativo a la hora de correr hacia atrás y ayudar a defender pero a la hora de atacar no encontraba compañía (pero sigue intentando). Scocco fabrica como puede (ayer fabricó los goles que recordaremos por siempre) y Borré se desprendió varias veces de la marca (es movedizo y lleva marca para que Scocco tenga más espacios).

Falta mucho pero al menos empezamos a ver algo diferente, algo que nos puede ilusionar y regalarnos lo que tanto estábamos esperando. Por fin llegó el fútbol...
Por Charro.