"Se pueden arreglar campeonatos enteros, como el de Boca de Ischia." Javier Ruiz árbitro "Ehhehh, eh yo pienso de que ehhehh eeeehh (?)." DAP "No estén cagados." Daniel Passarella

lunes, 2 de abril de 2018

El golpe anímico está siendo el inicio del buen camino

Pinola haciendo un gol de rebote pero fundamental para el trámite del partido

Defensa y Justicia siempre le planteó en estos años un desafío diferente; cancha chica pero planteo muy abierto con mucha movilidad, precisión y juego en velocidad, ante estos planteos los partidos suelen ser con muchos goles pero nunca había logrado ganarle a los de Florencio Varela en su casa. Este partido no fue diferente (a pesar que no repite el técnico y cambia mucho de jugadores, el juego sigue siendo similar) y también hubo varios goles (y muchos errados). Qué cambió? 4 victorias consecutivas nos convierte en un gran equipo? Estamos lejos de los objetivos pero Gallardo encontró el camino y el grupo encontró el convencimiento que había desaparecido, el equipo dejó de estar a la deriva dando pena en el campo de juego, desconsolado y encerrado en su sufrimiento para ser un equipo que sabe que debe pelear para conseguir sus objetivos. Puede cometer los mismos errores pero ahora intenta, puede no encontrar el camino pero ya no se rinden, pueden recibir un gol pero encontraron formas de atacar y buscar el gol. Este equipo aún no es sólido ni mortífero en ataque pero ahora se defiende y ataca con algunos errores corregibles. Hace unas semanas veíamos un equipo sin alma y sin ideas que además hacía todo mal, ahora se recuperó el alma, de a poco aparecen las ideas y algunas cosas se empiezan a hacer bien. Antes llegaban a la pelota los rivales y los jugadores millonarios los miraban desalentados, ahora pelean las posesiones y el partido puede ser peleado, es una forma de sumar puntos mientras se encuentra un mejor funcionamiento ofensivo-defensivo y de transición. Así todos tenemos esperanzas de mejorar.

Ayer a River Plate le tocó jugar a la 11 de la mañana (el nuevo disparate de la superliga) y se balanceó entre algunas buenas y malas jugadas. El equipo no brilló pero dejó de ser desastroso. Armani no tuvo nada que hacer en el gol, tampoco tuvo grandes atajadas (una de sus virtudes, como también lo era de Barovero, es que simplifica sus movimientos, controla, achica y minimiza las posibilidades de los rivales, no se le ven grandes atajadas pero cuida muy bien el arco) pero solo le hicieron un gol cuando el rival llegó muchas veces (ambos equipos erraron mucho en la definición). A Montiel y Saracchi les tocó subir mucho en este partido (especialmente Montiel) y se los vió bastante bien cuando avanzaron (el 4 estuvo muy activo, dio muchos pases y muchas veces llegó hasta el fondo). En la marca tuvieron algunas fallas pero obligaron a que el rival se cerrara. Maidana no estuvo tan seguro como en los últimos partidos (se le nota lento cuando lo encara en velocidad y pelota dominada un delantero) y Pinola estuvo un poco más seguro (además de convertir el fundamental segundo gol al término del primer tiempo).
Buena definición y él se creó el espacio para el excelente pase de Martinez

Ponzio volvió a no encontrarse pero fue un partido de mucho despliegue y dejó más liberado a Perez que estuvo mucho más participativo en ofensiva (le vino muy bien el trabajo físico que hizo cuando el equipo jugó en Chile). En ofensiva  se notó el trabajo de Fernandez (especialmente al dar la mano defensiva y ser el apoyo a la hora de salir en ofensiva) pero fundamentalmente cada vez sirve más el trabajo del Pity Martinez, está en su punto justo de madurez. Lo que antes terminaba mal en un porcentaje enorme ahora es a la inversa y a su desequilibrio, guapeza y viveza le sumó criterio (el gran defecto de los primeros años). Su confianza también creció mucho y siente la responsabilidad que sus compañeros ponen en él, sabe que él tiene la llave ofensiva del equipo más allá que otro haga una genialidad individual o que otro sea la figura. Es quien se anima a patear, a desbordar y hacer el pase entre líneas. Un jugador completo que empieza a ser fundamental en cada partido. Arriba, Pratto se desvive peleando con los defensores, haciendo un gran trabajo de desgaste (algo que no se suele valorar en nuestro club y un tipo de jugador al que no estamos muy acostumbrados) y ayer se sacó la mufa con un buen gol (después de haber intentado un interesante definición en el primer tiempo que se fue junto al palo) que le dio tranquilidad al jugador y al equipo para tratar de mantener el 3 a 1. Pratto se sacrifica en la lucha cuerpo a cuerpo y Mora lo hace corriendo y cada vez está más afilado (a pesar de haber perdido un gol increíble en el primer tiempo), físicamente también se desgasta mucho (ayer Gallardo eligió sacarlo a él en el final del partido) pero es fundamental para provocar el error rival.

Ayer los cambios más que buscar variantes, buscaron aire para el equipo y no agotar a los jugadores más importantes que jugarán el jueves. Zucculini le dio aire a Ponzio y finalmente Scocco y Borré hicieron lo propio con los otros delanteros. Falta mucho y hay que ir de a poco con los objetivos (estamos a 2 puntos de la Sudamericana y a 7 u 8 de la Libertadores, la Libertadores y copa argentina seguirían hasta fin de año) pero al estar tan lejos (en rendimiento y puntaje) no queda otra que sacrificio y paso firme.


lunes, 19 de marzo de 2018

Inyección anímica para encontrar el camino

El tanto y la ovación... muy merecido

Haber ganado la supercopa (?) le dio a este equipo un golpe anímico para ir en busca del nuevo River Plate. Después de haber sufrido un par de meses viendo un equipo fantasma, repentinamente revivió y nos encontramos con un equipo con alma y determinación. Aún estamos lejos de encontrarnos con un equipo consolidado pero al menos los jugadores recuperaron la memoria; Gallardo aún busca los intérpretes pero por primera vez sabe que tiene variantes interesantes en el banco y eso le permitió ayer llegar a la victoria.


Ayer River Plate entró a la cancha concentrado (algo muy difícil de lograr después de los festejos previos al partido), entró con otro espíritu, los jugadores corrían y enloquecidos iban en busca de la pelota sin darle aire al rival, así se encontró con el gol antes de los 5 minutos (un error de un defensor que le dio la pelota al Pity dentro del área) y dominó el primer tiempo a placer pero no logró hacer el segundo gol y lo pagó en el inicio del segundo tiempo cuando Belgrano le empató sorpresivamente. Lo primero que se pudo ver como recuperación (más allá del buen juego del primer tiempo) es que el equipo no cayó mentalmente (lamentablemente el equipo se distrajo y desordenó por lo cual tuvo 5 o 10 minutos en los que Belgrano empezó a llegar muy peligrosamente) y siguió buscando la victoria, lo presionó y encontró los goles que se le habían negado cuando mejor jugó. 


Ayer Armani volvió a salvar al equipo en un par de oportunidades y sin embargo no lo vi tan bien como en otras ocasiones. Creo que tomó decisiones equivocadas pero aún así sigue demostrando que sabe y que es muy determinado, cuando toma una decisión la lleva a cabo y a fondo. Deja la imagen que aún si cometiera algún error grave (lo cual aún no hizo en su corta historia en el club) no dejaría de transmitir seguridad. Ayer el nivel individual de la defensa estuvo muy desparejo. Mayada estuvo muy eléctrico, corrió muchísimo y dio unos piques excepcionales, muy rápido, muy conectado con el juego, con muchas ganas de participar y demostrar que está para titular. Defensivamente muestra defectos pero la entrega le permitió ganar más de lo que perdió y jugó con la ventaja de tener a un Maidana bastante recuperado. El central recuperó la seguridad y personalidad que siempre lo caracterizó y que en el último año no podía demostrar por algún problema físico que no lo dejaba en paz, había perdido velocidad y eso lo molestaba tanto que lo hacía dudar, ayer (al igual que en los últimos partidos) logró adueñarse del sector y hacerle sentir el rigor a los atacantes rivales. Por la izquierda Saracchi sigue sin recuperar su nivel pero gracias a su velocidad y decisión logra suplir algunos errores. No está terminando bien las jugadas (los centros ya no van a la cabeza de algún compañero) pero participa bien del juego, defiende con falencias pero su velocidad logra que vuelva a molestar al rival. A su lado Pinola tiene algunos buenos y malos momentos (a veces con personalidad y experiencia logra recuperarse pero otras es claramente superado y comete faltas peligrosas). La defensa mientras está bien parada y es ayudada por el mediocampo funciona, se complica cuando el medio va alocado hacia adelante y la defensa queda mal parada o cuando el rival recupera la pelota y sale en velocidad con varios hombres, en esos casos nuestros defensores y mediocampistas son más lentos que el rival y todos van hacia el que tiene la pelota sin mirar a los otros rivales. Por estas cosas a este equipo aún le falta mucho pero recién ahora se puede decir que está empezando su nuevo ciclo.


En el medio fue muy bueno lo de Ponzio, como siempre se la jugó varias veces y más allá de algunos errores con la pelota o en la ubicación, es una rueda de auxilio fundamental para la defensa (el contraataque del último gol nace con un caño suyo en defensa cuando el rival nos apretaba peligrosamente) y a veces es una salida con la pelota. A su lado Perez sigue haciendo un trabajo de mucho desgaste defensivo y por eso no está participando mucho en ataque, juega con la pelota muy lejos del arco rival y pocas veces va hacia delante, inicia las jugadas, traslada la pelota pero pocas veces es vertical hacia el arco. El gran cambio en el juego se debe a la recuperación del nivel de Martinez y Fernandez. Nacho se adueñó de la pelota y ayer tuvo un gran despliegue, se notó mucho cuando se cansó y empezó a cometer errores con la pelota y dejó de tener despliegue (unos 10 minutos antes de salir). Ayer tuvo varias situaciones claras de gol que malogró y eso fue gracias al despliegue, siempre fue alternativa de pase y distribuyó bien el balón hacia los laterales. El Pity ayer estuvo muy participativo (se obsesionó un poco con los tiros al arco) y lo debió agrandar muchísimo la ovación que recibió después de hacer el primer gol. Arriba Mora y Pratto hacen un gran trabajo de desgaste, el uruguayo corre incansablemente a los defensores provocando el error y Pratto pelea físicamente con toda la defensa, los agotan, los molestan y abren espacios para la llegada de los laterales o para el Pity y Fernandez. Pratto está falta de confianza y a veces parece muy lento, ayer mucho tiempo jugó por el lateral y dejó a Mora en el área (no se a que se debe) pero se nota que está ansioso por lograr un gol importante que quite los rumores del Monumental (ayer tuvo alguna oportunidad y no logró llegar al gol). En el segundo tiempo ingresaron Quintero (por Perez, lo cual dio más peso ofensivo pero nos complicó defensivamente), Scocco (por Mora) y sobre el final De la Cruz (por el agotado Fernandez). El ingreso del colombiano no fue tan bueno pero al menos tiene buena visión de juego y sabe donde debe ir la pelota (ayer tuvo buenos cambios de frente y algunos pases en profundidad) pero fue el ingreso de Scocco lo determinante, con 2 contras fue todo lo letal que no había sido el equipo en los otros 75 minutos. Por rapidez, habilidad y puntería cambió el resultado.

Sin dudas falta pulir algunas cosas en ataque y en defensa, hay que estar atentos a como jugar cuando se tiene la pelota y cuando se la pierde, hay que trabajar en la cabeza de los jugadores para cuando no se da el resultado y cuando se recibe un golpe inesperado, hay que decidir cual será el equipo titular y mantener el nivel de los suplentes, habrá que trabajar en la definición y en las marcas en retroceso... hay mucho para hacer pero la alegría es que apareció el equipo; ya tiene alma, confianza y determinación, ya saben lo que quieren y que pueden hacerlo, son concientes de sus defectos pero ahora también saben que tienen virtudes sobre las que deberán trabajar, saben que hay equipo y que pueden llegar lejos. Hay mucho trabajo por delante pero ahora todos sabemos hacia donde quiere ir el equipo, ya hay un camino y una dirección, será cuestión de poder ir más seguros por ese camino. Es fundamental saber que hay varias alternativas diferentes para jugar. Hoy Gallardo puede elegir entre Maidana, Pinola y Martinez Quarta (más allá del nivel que muestren, sabe que cada uno puede darle variantes), Mayada, Montiel y Moreira también son variantes interesantes por derecha (Mayada puede serlo por izquierda); en el medio tiene en 3 puestos a Martinez, Fernandez, Perez, Quintero, De la Cruz y Rojas, todos jugadores interesantes con características muy diferentes, lo cual le abre un abanico interesante. Arriba tiene a Mora, Pratto, Scocco y Borré, también con características muy diferentes. El único puesto que aún no encontró variantes es con Ponzio (especialmente por el muy bajo nivel de sus reemplazantes). Si logra que todos los jugadores se recuperen en confianza y mantengan un nivel regular y aceptable, veremos si logramos tener otra etapa exitosa.

Por Charro.

jueves, 15 de marzo de 2018

Que lindo ser campeones... ¿el quiebre para volver?

Ponzio recibe la supercopa 2017 de la mano de...

Una final inolvidable, un camino hacia la esperanza, algunos niveles individuales que recuperaron la memoria, un partido con la guardia alta, una victoria frente a los bosteros que debe servir para empezar de nuevo y dejar atrás todas las broncas y los dolores que este grupo llevaba en el alma. 
Gracias...

Este partido no se jugó genial, nadie dirá lo pasamos por arriba, nadie dirá que nos reencontramos con el nivel de juego perdido y ni siquiera se podrá decir que dejamos atrás esta etapa desastrosa que se estaba viviendo. No hubo señales de algo exageradamente diferente pero se estaba jugando tan mal y con tantos defectos que el partido de ayer nos devolvió la esperanza y la felicidad, ya deja de ser solo ¨aguante¨ para transformarse en un crédito abierto. 
Otra eliminación de bosteros... otra copa a las vitrinas

El equipo ayer tuvo orden y fundamentalmente volvió a tener alma. Varios jugadores de la vieja guardia demostraron que están hechos para estos partidos. El nivel de Ponzio, Maidana y Mora nos llenó de felicidad y a ellos se sumaron Pity y Nacho Fernandez, más los gloriosos Armani y Scocco. Es injusto dejar afuera al resto porque todos jugaron con los dientes apretados (especialmente Montiel y Saracchi) y solo así lograon neutralizar lo que todos sabíamos.
La super figura... extraordinario

El nerviosismo que vivimos como hinchas (imposible verlo en otro lugar que no sea la cancha o el club, aunque estuviera repleto y que haya sido un sauna) se vio coronado por la entrega del equipo (agradecimiento eterno por ello). Hubo algunos puntos más que destacables. El nivel demostrado por Armani es de selección, no solo por las atajadas sino por lo que transmite y su reacción y determinación en momentos claves del partido. Cubre todo el arco, es difícil pasarlo por arriba y por abajo es hábil y rápido. Ayer tuvo 5 atajadas determinantes y fue fundamental para aguantar el resultado cuando los bosteros tuvieron la pelota y presionaron para empatar el partido. Primero los contuvo y luego varias veces los frustró, se convirtió en el muro que no supieron trepar. Armani es el nuevo símbolo, el arquero que River Plate estaba necesitando para poder soñar (como lamento que no haya estado el año pasado). 
El gol...

La defensa fue el otro punto alto y fundamental. Los laterales no gravitaron en ataque pero debieron contener los avances por ese sector. No es fácil contener a los rápidos laterales bosteros, ni a los volantes ofensivos que apoyan a esos laterales, ni a los atacantes veloces y habilidosos. Era fundamental frenarlos y Gallardo dispuso mantener la defensa cerrada y que Pity y Nacho se desgastaran cubriendo la salida de esos jugadores para que después la defensa los esperara bien cerrados. Montiel y Saracchi cumplieron (más allá que varias veces sufrieron y fueron pasados) y detrás siempre estuvieron Maidana y Pinola (al estar tan compactos no debieron correr para cubrir largas distancias) o enfrentar a jugadores que llegaban con la pelota bien dominada). El otro punto alto fue nuevamente la personalidad de Ponzio. El central los domina mentalmente, es un fantasma permanente para los bosteros que tienen la pelota y es el roce constante y molesto para los jugadores bosteros que están acostumbrados a que no los miren siquiera. A esta presión se sumó Enzo Perez (que aún está en deuda aunque ayer supo no desentonar tanto con el resto) y así cerraron los caminos cómodos que tanto le suelen regalar a los bosteros. Con esta firme columna defensiva (sustentada básicamente en el orden, la presencia, la presión, la concentración y el deseo de renacer) River Plate buscó contener al rival y esperar sus oportunidades (o sea, al principio encontrar algún juego asociado y después del primer gol buscó la contra rápida y letal).
Conmovedor. Volvió campeón. Merecidísimo y ojalá que le sirva para seguir ganando títulos.

Arriba se despertaron y asociaron por fin Martinez (fundamental a la hora de aguantar la pelota y armar la contra) y Fernandez (esta vez no eludió la responsabilidad). Fernandez se adueñó del balón y Martinez impuso su ritmo, desequilibró e hizo jugar. El trabajo de los delanteros fue muy sacrificado (siguen necesitando que se los abastezca para llegar al gol), mucha marca y mucho roce para generar alguna jugada, para aguantar la pelota, para robarla o para chocar con los defensores rivales. Mora corrió y apretó, Pratto chocó y peleó... así se llevó algo de peligro y fundamentalmente se ensució el juego bostero. El penal llegó por juego asociado y cambió el trámite del partido.
Goleador... gracias

En el segundo tiempo salió Montiel contracturado y Mayada supo seguir aguantando el lateral (le costó muchísimo su lucha ante Pavón pero siempre molestó), Enzo Perez dejó su lugar a Zucculini (mantuvo la estructura y milagrosamente no fue amonestado. Al menos esta vez no sobresalió por hacer mal las cosas, lo cual podría ser un buen inicio para el jugador). Finalmente Scocco entró promediando el segundo tiempo y en la primera pelota que tocó (gran jugada de Scocco, Fernandez y Martinez), la mandó dentro del arco.
Seguirá rosqueando, pidiendo favores y aceptando plata... ojalá Gallardo siga poniéndole los límites
Esperemos que esto sea el inicio de una nueva etapa, será muy dura (Tapia será vicepresidente de FIFA y ya sabemos que tienen todos los puestos principales de todos los lugares que tienen alguna relación de poder con el fútbol) pero no hay que bajar la guardia ni dejarse llevar por delante. Ayer se pudo...

Por Charro.

domingo, 11 de marzo de 2018

No hay equipo... Sin confianza, sin conexión

Arquero con personalidad y con las ideas claras...

Es insólito. Nadie ha podido explicar como es que estos jugadores dejaron de jugar al fútbol. No lo hacen como equipo y varios dan vergüenza ajena al verse el nivel individual. No es solo que están perdidos dentro de la cancha, que no tienen a quien dársela o que corren sin sentido a la hora de marcar o de ir a la pelota; perdieron la viveza, los conocimientos básicos, la confianza en sí mismos, la confianza en el compañero; ya no saben cuando poner la pierna, perdieron la decisión, no saben a quién dársela, miran, piensan y cuando quieren ejecutar ya es tarde. Hay jugadores que no pueden dar un pase a 1 metro, hay otros que no pueden marcar porque se dejan ganar la posición, hay quienes dudan un par de segundos y en el fútbol de hoy eso significa que te ganen en la carrrera, que te ganen en la pelea por la pelota, que anticipen el pie o la cabeza para que la pelota pase a ser del rival, que llegue la marca y el pase ya no sirva, que el pase sea incorrecto y genere una contra. Ayer se vieron pases a 1 metro que casi le parte el pecho a un compañero, defensores que erraban a la pelota y dejaban a un rival en posición de gol, pases hacia atrás dándosela a un rival... un sinfín de errores que enojarían en los partidos barriales de los domingos.

Este River Plate está fuera de foco, todos perdieron la brújula, desde los dirigentes hasta los jugadores. Nadie sabe que hacer con este presente adverso y no tienen idea como reaccionar. Vaya uno a saber la historia que habrá detrás del dóping del año pasado, de la eliminación frente a Lanús, del dóping de Musto, de las designaciones arbitrales, de las decisiones arbitrarias que llegan desde presidencia, AFA, árbitros pero lo que queda claro es que no hemos sabido reaccionar ante esta situación y eso se traduce en el patético accionar del equipo. Esto ya va más allá de jugar mal, de no sumar puntos o sumarlos con ojete; esto es seguir en la pelea estando groguis pensando como hacer para no caernos y aguantar en lugar de ver como ganar o dar pelea.
Gol en contra pasando entre las piernas del arquero... así ganamos a los 93 minutos...

Ayer el equipo jugó (es una forma de decir) ante Patronato (nunca les habíamos ganado siendo ellos locales) y el resultado puede ser anecdótico, servir para las estadísticas o servir como el inicio de algo (?) pero el juego sigue siendo patético, inconexo, vergonzoso, inexpresivo, pasivo y hasta diría que de compromiso.

El resultado no fue de suerte (gol en contra a los 48 minutos), fue gracias a que nuestro arquero salvó todo lo que iba al arco (un viejo secreto del fútbol que los dirigentes olvidaron cuando dejaron ir a Barovero) pero eso no debe sacarnos del eje. Se salió de la racha negativa (partidos consecutivos perdidos de visitante, demasiados partidos sin ganar...) pero casi de casualidad, sin encontrar el juego ni el espíritu. No aparece el equipo pero menos aparecen el espíritu y la rebeldía para salir del mal momento.
 Increíble el nivel de Zucculini

Ayer por lejos Armani fue la figura. La única explicación del resultado está en las manos del arquero y el blooper de Patronato (una atajada a quemarropa dentro del área chica que logró sacar por encima del travesaño ingresarán al anecdotario del arquero si logra coronarse campeón). La defensa volvió a estar muy floja pero Maidana mostró una gran mejoría y Pinola mostró algunas de sus buenas cualidades sin embargo en conjunto la defensa estuvo muy dubitativa (gran defecto para una defensa). Mayada subió mucho y dejó espacios pero lo de Casco volvió a ser preocupante (o mejor dicho, es preocupante que Saracchi este tan bajo que permite que Gallardo dude entre él y Casco). Lo de Zucculini es inexplicable. Pega sin piedad (en todos los partidos recibió amarilla) y da tiros libres peligrosos, corre mal y por eso llega a destiempo y se ubica mal, se la pasa a los contrarios provocando contras peligrosas, hace todo al revés (ojalá en algún momento se tranquilice y empiece a hacer lo que se necesita). Tan preocupante como esto (o más) es lo de Perez. Enzo está desconcertado (y cada tanto muestra su frustración con alguna falta imperdonable), su nivel es demasiado bajo y no sabe que debe hacer en este equipo. Ayer jugó Quintero de titular y después de un interesante primer tiempo se fue desdibujando hasta salir muy cansado. Volvió a mostrar valentía (siempre la pide e intenta) pero se perdió en los intentos. Claro, al lado tenía a Auzqui (no se lo vió en todo el partido) y solo era ayudado por Mora (cada día más voluntarioso pero a veces cuesta...) y Borré (debe jugar más concentrado, intenta pero nunca termina la jugada). En el segundo tiempo ingresaron el Pity (aparentemente recuperado de la lesión), Nacho Fernandez (parece que empezó a moverse mejor) y Scocco (demasiado poco tiempo para insertarse en el juego) pero el equipo nunca se encontró.

Se viene la final ante los bosteros y como siempre se dice, estos son partidos a parte. En fin, habrá que creer sin fundamentos y rezar para que suceda el milagro. Algún día este equipo y estos jugadores deberían resurgir.

Por Charro.

lunes, 5 de marzo de 2018

Desinflados, golpeados, resignados y entregados

Penal perfectamente pateado... casi que fue lo mejor de la noche (?)

Patético empate ante Chaca. Ver a River Plate es un golpe al corazón. Cada domingo la preocupación y el dolor aumentan porque las soluciones no solo no aparecen sino que la caída es más profunda y el rumbo cada día es más confuso. Ya no es solo cuestión de perder (o empatar ante rivales muy inferiores en el Monumental), de jugar mal, de tener arbitrajes tendenciosos, humillantes y provocadores, de ver jugadores inexplicablemente con la casaca millonaria, del bajo nivel de varios jugadores, de la desorientación del técnico, del ausentismo dirigencial para defender al club, de la ofensiva demostración de AFA y presidencia, de la suerte que no acompaña... a todo esto ahora debemos sumarle un equipo sin alma que se va cayendo a pedazos cada vez que ve que algo no le sale o que se hace cuesta arriba. Cuando parece que puede recuperar la memoria, cuando parece que quiere intentar, cuando parece que el equipo puede recuperar y jugar con la pelota (una leve impresión, casi un espejismo)... siempre pasa algo que va golpeando al equipo y lo termina desinflando.

Ayer un penalazo a los 3 minutos (el árbitro a 2 metros, viendo la jugada sin interferencia y claramente el arquero derriba a un jugador que lo había eludido y solo debía patear al arco pero cae atropellado; imposible no cobrar ese penal salvo que alguien haya dado la orden de no cobrar penales). El equipo sigue intentando y busca por los laterales, Nacho Fernandez se presenta como receptor, De la Cruz se mueve, los delanteros se mueven pero todo va muriendo en la imprecisión, en malas decisiones, en un árbitro que permite que hagan tiempo, en la impaciencia del público y los jugadores, en los pocos tiros al arco que terminan sin entrar al arco, en posiciones adelantadas... un combo de una cancha inclinada (el muy modesto Chacarita ni siquiera pateó al arco y apenas pasó la mitad de la cancha) pero con pocas alegrías hasta que faltando 3 minutos al árbitro no le queda más remedio que cobrar un penalazo (después de los insultos al presidente en el primer penal no cobrado y lo burdo del segundo penal cuando un defensor toma del hombro a De la Cruz y como no puede voltearlo, lo toma del otro hombro y lo voltea dándolo vuelta). Son tan burdos y alevosos los penales que no tengo dudas que los árbitros tienen órdenes. Así como Lousteau no cobró los 3 penales en la bostanera (más otros 3 dudosos) y un defensor bostero hasta se dio el lujo de agarrar al delantero de River Plate aún cuando estaba en el piso porque se sabía impune, ahora las faltas también son burdas porque se sienten que puede pasar sin recibir pena.
Lo tomaron del hombro derecho y escapó, lo tomaron del izquierdo y lo dieron vuelta. La próxima les permiten dar un cuchillazo

Faltando 3 minutos River Plate se pone en ventaja y podría planificar el segundo tiempo con más tranquilidad pero todo se derrumba en un contraataque, en la primera llegada, en el minuto final del primer tiempo, ante un equipo que nunca quiso atacar. En el segundo tiempo se esperaban los cambios, el león herido que se comería a su presa, la reacción de un equipo superior que quiere salir a demostrar su superioridad, el alma de un equipo que no quiere decepcionar a su público, el corazón herido de un campeón, la rebeldía del equipo que es damnificado por el poder de turno, los jugadores que no aceptan ser maltratados por el periodismo y las redes sociales, el hastío de los jugadores por jugar mal... nada de eso apareció, todo fue al revés y lentamente el equipo se fue desinflando en inoperancia e impotencia, regaló la pelota, dejó agrandarse al rival, empezó a llegar un rival mediocre y nos salvamos de goles debajo del arco, los cambios aumentaron el desconcierto general, el equipo ya no pensó y empezó a chocar, dejó de correr para lamentarse y ver como nos lastimaban, Chacarita empezó a jugar al pelotazo y sus delanteros ganaban la pelota, el único jugador pensante (el colombiano Quintero) seguía en el banco y nadie podía creer lo que pasaba porque nos hundíamos en la desesperación y la resignación. Nos estábamos entregando lentamente hasta que Gallardo le puso la firma a esa resignación y entrega. Inexplicablemente sacó a Pratto y Scocco para poner a Auzqui y Borré...

Ya nada fue igual... fue mucho peor (si, mucho peor). El equipo que se iba desinflando se pinchó y ya no tuvo alma ni reacción. Ni siquiera el ingreso del colombiano cambió algo. La negatividad es un manto que se impregna en la mente y el alma de cada jugador resignado, debilitado, cobarde y/o inepto que acepta un destino perdedor sin dar todo lo que tiene. Este equipo no se rebela ni explota ante la adversidad o ante el golpe de knock out que recibió en Lanús por la copa (desde ese partido quedamos con mandíbula de cristal). Recuerdo en 2008 cuando San Lorenzo nos dejó afuera y al domingo siguiente nos ganaba Gimnasia y los jugadores en el entretiempo se juraron salir campeones (el día del maíz), recuerdo la eliminación por penales en el Monumental en la semifinal de 1995 y al año siguiente ser campeones de América o el antepenúltimo lugar en 2013 y salir campeones en 2014 después de ganar en la bostanera. Equipos con alma y rebeldía que deseaban ser campeones. Equipos que con convicción no se resignaron ni siquiera en los malos momentos (en el 96 casi quedamos eliminados por un desastroso partido en octavos en Perú, en 2008 en Colón jugamos con un hombre menos y ganamos con gol agónico, en 2014 todos recordamos el penal atajado por Chichizola en el último minuto ante Racing o el penal de Barovero a Gigliotti). Un equipo con alma se sobrepone a los malos momentos y este equipo sigue sin explicar que pasó en Lanús y mucho menos logra reaccionar.

No reacciona nadie. Ni los dirigentes (absolutamente ausentes y mansos ante el avasallamiento de AFA y presidencia), ni el cuerpo técnico (que no encuentra el equipo y mucho menos levanta a su plantel), ni los jugadores (que no responden individual ni colectivamente), ni los hinchas (que nos fastidiamos, no alentamos como acostumbramos porque somos parte del fastidio, la decepción y el desconcierto).
Pratto pelea y quiere demostrar pero aún no puede ser efectivo. El equipo no acompaña

Que se puede decir. Gallardo dice que no encuentra el equipo (está clarísimo) pero esto es difícil cuando el nivel individual de algunos jugadores es paupérrimo. Que alguien explique que le está pasando a Martinez Quarta (que volvió sin jugar un partido bien y está empeorando; ni siquiera la confianza de la cinta de capitán lo ayuda). Chacarita no tuvo ideas de juego, se limitó al pelotazo porque le sirvió (sin delanteros capaces de molestar con su físico o velocidad) y la dupla central (Pinola por izquierda) fue pasiva, casi cómplice durante los últimos 30 minutos. Fueron parte del desmoramiento moral y futbolístico. Casco por derecha y Saracchi jugaron más ofensivamente pero defensivamente fueron parte del colador. En defensa nadie pone la pierna y los rivales pasan tranquilos como si fuera un entrenamiento en el jardín de la casa de un jugador (los goles de Velez, Flamengo y Chacarita ingresaron al área con pelota pasando entre piernas inmóviles de los defensores). Zucculini aún no se sabe si no se enteró que lo trajeron para ser el 5 de River Plate (sucesor de Ponzio) porque no se ubica en el campo de juego, pega indiscriminadamente y jamás se la pasa a uno con la banda roja (tampoco ayudan las camisetas ridículas que estamos usando y espero que Zucculini no sea un caso más de los que le pesa el manto sagrado). Arriba De la Cruz sigue siendo el mismo jugador movedizo, flojo y con un casco en la cabeza, Mayada participó poco (casi perdido por la izquierda como reemplazo de Martinez) y Fernandez empezó muy motivado, con buen despliegue y adueñándose del balón pero terminó en la misma patética desidia del resto (quiero creer que sus malas decisiones del final no fueron por cansancio). Arriba Scocco fue luchador (fastidioso por el penal que no le cobraron) y Pratto fue el que más intentó (no logra afianzarse en el gol). No te salva Armani (el gol fue un tiro a quemarropa que le pega en la rodilla y se desvía contra el palo), no te salva el banco (ningún jugador, salvo Quintero, te ilusiona con dar alguna alternativa a lo que se ve), no te salva Gallardo, no te salva ni la suerte (a la buen suerte hay que llamarla y no es casual que la pelota pegó 2 veces en el palo y se fue)...

Para qué seguir poniéndole palabras a este doloroso momento, a esta falta de respuestas, a este decepcionante accionar de todos (incluído el poco acompañado MMLPQTP).

Por Charro.

jueves, 1 de marzo de 2018

Fuimos a Río a buscar confianza y nos encontramos con un punto

Mayada y Martinez Quarta festejando y recordando cuanto costó llegar a este punto

Cuando todo está mal, cualquier primer paso es bueno. Aparentemente Gallardo fue a Río con la consigna de buscar confianza, de afianzar algo desde donde poder sostener el rearmado del equipo y así se armó un equipo defensivo con un esquema amarrete pero consiguió casi sobre el final del partido traer un punto, levantar 2 veces la desventaja (se reencontró con la respuesta anímica más allá que los goles hayan sido bastante casuales), el arquero sigue mostrando mucha seguridad... claro está que volvimos con unas cuantas preocupaciones porque siguen sin respuestas muchas de las preguntas que teníamos y el temor es que se haga costumbre permanente el jugar mal y sin ideas. Hoy preocupa el pésimo nivel de varios jugadores (lo cual hace imposible moldear cualquier táctica). De nada servirá una táctica más agresiva si seguimos regalando goles o si seguimos regalando la pelota cuando tenemos un compañero a 2 metros.
Gracias Mora...

Ayer la defensa fue un concierto de errores más allá de la presión, Armani volvió a mostrar sus virtudes (sin culpa en el penal y una definición a quemarropa dentro del área) pero esta vez tuvo problemas en la salida. El resto de los jugadores de la defensa tuvieron un concierto de errores/distracciones que arruinaron lo bueno que también pudieron hacer. Los laterales casi no subieron (Saracchi empezó a hacerlo en el segundo tiempo y Montiel acompañó cuando estábamos perdiendo) y no estuvieron firmes en la marca, varias veces los pasaron o desacomodaron pero alternaron con algún acierto. Algo similar les pasó a Maidana y Martinez Quarta (es aterradora la diferencia de nivel que tienen respecto a sus mejores momentos), cometieron muchas faltas, les ganaron la posición muchas veces (segundo gol por ejemplo), estuvieron timoratos en las marcas (ejemplo primer gol) y hasta las distracciones fueron preocupantes (la forma en que fueron a marcar sobre el final del primer tiempo en un centro al área que el árbitro debió cobrar penal es increíble). Claro que al mal nivel de los defensores hay que sumarle el pésimo nivel de los mediocampistas (con un triple 5). Zucculini se llevó las palmas de los desastres. Está perdido en la cancha (no tiene idea donde ubicarse ni la camiseta que lleva puesta), hace faltas todo el tiempo (incluido el penal tonto por ir con la mano levantada), pasa la pelota mal hasta en los pases de 1 metro y apenas se puede reconocer que corre y presiona. Ponzio mostró lo de siempre pero volvió a ser el causante de un gol (esta vez cometiendo el penal) y es arrastrado por el equipo a cometer faltas peligrosas (esas que terminan en centros al área). En este concierto de desorientación hay que sumar a Enzo Perez que apenas pisa el campo rival gracias a la táctica defensiva pero tampoco logra hacer mucho defensivamente (urgente se necesita alguien que lo acompañe y que empiecen a jugar al fútbol).
Mora cabeceó pero no se enteró que covirtió el primer gol millonario

Muy pobre resultó lo hecho por De la Cruz (cuando arrancará a jugar?) más allá del centro para el gol de Mora. Ya no se sabe si le falta sopa (vive lesionado y caído por los choques con sus rivales), si le faltan sesos (sus malas decisiones preocupan), si le falta sangre (corre mucho pero en los choques siempre pierde) o simplemente insinúa sin resultados porque no es buen jugador (desconfío de los jugadores jóvenes que vuelven de Europa sin haber rendido medianamente bien allá). Arriba estuvieron Pratto (peleando todo el tiempo con los centrales brasileños para llevarse alguno de los pelotazos que le tiraban) y Mora (lejos el mejor de River Plate) que mostró un espíritu contagioso, corrió siempre y molestó al rival. Presionó y los desconcentró, intentó ganar en carrera y acompañar al que llevaba la pelota para ser opción de pase, corrió para recibir el pelotazo ganando la espalda de su marcador y fue inteligente para desbordar y tirar el centro atrás (en el área solía estar Pratto con 5 defensores) hacia los que llegaban (así llegaron las jugadas más peligrosas).


Un festejo y gol muy merecido...

En el segundo tiempo entró Mayada (por Zucculini, otra vez el primero en salir), quien tuvo un partido interesante (más allá del golazo de larga distancia faltando 3 minutos) ubicándose en el mediocampo y tirado hacia la izquierda (otro bombero que Gallardo pone donde sea necesario). Se juntó mucho con Mora y Saracchi y ahí lograron quebrar la defensa brasileña. Volvió a ingresar Quintero (nadie entiende porqué no jugó desde el inicio. Tiene un gran manejo de pelota parada y logra que le provoquen faltas seguido) dando respiro a la faz defensiva y sobre el final (cuando se necesitaba hacer algún gol) ingresó Scocco (no tuvo mucho para hacer).

Se logró un punto y tal vez sirva como punto de partida anímico. Tal vez sirva para pensar en hacerse más duros defensivamente y empezar a crecer desde lo futbolístico (algo fundamental porque en este momento estamos en 0). Tal vez desde las seguridades se pueda construir un equipo que todavía no sabe hacia donde va ni cual es su potencial, que no cree en sus capacidades y no encuentra sus virtudes. Veremos que pasa el domingo...

Por Charro.

domingo, 25 de febrero de 2018

Con la guardia baja y nadie aparece

Mora se creó espacios a puro coraje

Terrible derrota en Velez (la sexta consecutiva de visitante, sucediendo algo que no se veía en los últimos 78 años). No es el resultado (1 a 0) lo nefasto sino la situación. Un partido en el que nada sale bien, no acompaña la suerte (tiros en el travesaño), ni los árbitros (no expulsó a Cubero y en la siguiente expulsa a Perez), ni los dirigentes (D´onofrio saliendo a defender a Macri y dejando solos al cuerpo técnico, jugadores e hinchas), ni el técnico (sigue sin encontrar el camino que nos saque de este pozo), ni los jugadores (cada vez más desanimados y con menos capacidad de reacción) y cada vez nos hundimos peligrosamente más hondo).

Es asombroso como una dirigencia y un cuerpo técnico que han acertado y demostrado capacidad e idoneidad en ciertos temas, hayan errado y demostrado incapacidad en el armado de un nuevo plantel luego de haber desarmado / destruído un plantel campeón. Este es un plantel con cierta calidad individual en sus jugadores y cuerpo técnico (hasta podríamos incluir a los hinchas y dirigentes en esta categoría) pero que aún no dio un paso para convertirse en un equipo; le falta todo. No demuestran nada como equipo, no hay sociedades, no hay rebeldía para reaccionar, no hay espíritu competitivo ni dentro ni afuera del plantel, están muy tranquilos, muy conformes y cuando la realidad los golpea ya es demasiado tarde para reaccionar porque por más que quieren no saben como. Está todo tan mal que no se sabe si hay que hacer un lavado de cabeza, darles algunas fechas de banco, hacerlos trabajar en cuádruple turno, dejar que juegue la reserva (?), bajarles los premios...

El plantel campeón de América era duro y seguro, no se les hacía goles y trabajaban para convertir, llegaban al gol y sabían cerrar la puerta. Este plantel es débil e inseguro desde lo anímico, nos hacen goles por errores tontos y no tenemos idea como llegar al otro arco. Este River Plate lastima porque ha demostrado una gran generosidad en levantar a cualquier rival destruído para hundirnos más a nosotros, lastima por su falta de reacción. River Plate hoy no tiene un jugador que rompa los esquemas defensivos rivales porque nadie (salvo Martinez) se anima a eludir jugadores y nadie entiende aún al colombiano Quintero (el único en dar pases cortados ante los movimientos de los delanteros), no hay un jugador que juegue por las bandas tanto en defensa como ataque (Fernandez está bajísimo, Rojas estaba igual y encima se lesionó, Moreira a veces lo hacía pero nadie sabe que pasó, Perez no tiene resto físico para correr y está muy abajo sin lastimar (algo similar que Quintero), el equipo es muy largo porque nadie sabe salir y cuando llegan al fondo por las bandas terminan volviendo casi hasta nuestro arquero; queremos jugar con los laterales pero nos encerramos contra el lateral sin que haya un jugador que se acerque (por eso volvemos siempre hacia atrás), nadie cambia los ritmos, los mediocampistas están desanimados y deambulan como zombies en lugar de buscar los espacios, la desconfianza los convirtió en jugadores patéticos, sin ideas y sin ganas; inofensivo y desordenado, no defiende ni ataca, ya no sabe si presionar, esperar o jugar porque no sabe como se hacen estas cosas. Un plantel donde ni siquiera puede llegar un jugador de inferiores (quiero que alguien explique que les hicieron a las inferiores; como puede ser que no salga un jugador. Hace años que no se forma un jugador con proyección. D´onofrio debería dar explicaciones al respecto).
Pratto aún mostró muy poco

Un gran equipo se transforma luego de que el plantel se une por el aprendizaje de los golpes que van recibiendo o porque la personalidad de los jugadores los une en un objetivo. Este plantel ya demostró que le falta personalidad y tuvo suficientes golpes como para reaccionar. Esto lo convierte en preocupante. Un equipo que ya debería conocer el camino, aún no ha dado el primer paso y ni siquiera sabe hacia donde darlo. La derrota ante Lanús, el doping, la ida de varios jugadores en momentos inoportunos, la llegada de jugadores que debieran haber dado soluciones y solo empeoraron el presente y aumentaron los interrogantes... todo esto nos deja en la mayor penumbra e incertidumbre... dónde estamos (desde lo deportivo, institucional, político y económico)? hacia dónde vamos? y cómo se sale?

Gallardo volvió a intentar poner un equipo mixto (ante tantos bajos rendimientos uno empieza a preguntarse si era un equipo de suplentes y titulares o solo fue la búsqueda de un equipo) ante la proximidad del partido ante Flamengo. Armani vuelve a demostrar que era el arquero que se necesitaba (junto a Alario fueron las 2 únicas incorporaciones acertadas hasta ahora de esta gestión), seguro, rápido, sabe lo que debe hacer y tiene personalidad (todo lo que le falta al resto del plantel). En la defensa no tienen idea donde pararse, como cubrir las espaldas, donde poner el pie, llegan a destiempo... es sorprendente en jugadores de esta calidad... inexplicable. Mayada y Casco subieron mal, marcaron mal y fueron mal acompañados por Martinez Quarta y Pinola. La defensa no es salida con la pelota y no tiene marca, o sea...
Scocco intentando definir...

En el mediocampo la situación fue peor (si, peor). Zucculini mal parado llegaba tarde a todas (se salvó de la expulsión) y junto a Perez, Palacios y De la Cruz nunca supieron que hacer. Los otros 3 demostraron lo que es jugar desmotivados (encima Enzo fue expulsado a mitad del segundo tiempo), no solo llegaban tarde por estar mal ubicados sino por no moverse, por dejar que pasaran los rivales mientras ellos los veían pasar. En estos tiempos no se puede dejar que el rival corra y uno empezar a correr cuando ve que lo pasaron como poste caído. Palacios no siente la marca y De la Cruz no sabe para que está en la cancha (cuando entró Mora empezó a correr en ataque y se contagió con algo de sangre). Qué se puede esperar de los atacantes? Nunca les llega la pelota y obviamente no la tocan. Ni Pratto ni Scocco pueden estar cómodos con este juego. Ponzio entró por Zucculini (previendo una posible expulsión) y no pudo transmitir nada (incluso en el gol se durmió). Mora entró en el ataque y logró que el equipo reaccionara (tarde y solo con espíritu) y Quintero le agregó algunas ideas.

Estamos mal, estamos en crisis, estamos sin respuestas... y ya no queda mucho tiempo.

Por Charro.

lunes, 19 de febrero de 2018

AFAno en el Monumental. Vinieron a cagarnos...

Los goleadores en el empate (atraco) ante Godoy Cruz en el Monumental

Creo que desde el arbitraje de Lousteau en la bostanera que no vemos un arbitraje tan descarado y alevosamente delictivo. Muchos árbitros son especialistas en inclinar la cancha, suelen ser sutiles y cuando no alcanza cometen algún ¨error¨ decisivo pero discutible, saben a que equipo deben darle tiros libres cerca de las áreas, saben a que jugador amonestar rápidamente, a quien deben permitir que le peguen más de la cuenta, permitir que los jugadores se tiren al piso y no se levanten o que los arqueros tarden en sacar, adicionar menos de lo que se debe... los métodos son muchos y suelen estar apoyados por los ¨periodistas¨ coimeros de los grandes medios. A estos arbitrajes manipuladores se suman los torpes que necesitan hacer algo escandaloso y quedar en evidencia para beneficiar a un equipo pero hay arbitrajes que sobrepasan estas categorías y a mi parecer son simplemente mensajes que vienen de arriba para disciplinar y dejarle en claro a todos los actores quien es el que manda y que se hará. Tanto aquel arbitraje en la bostanera como este (al que habría que sumar el de la bosta con CASLA de unas semanas), son claros mensajes de que se actuará con impunidad a favor de uno y en contra de algunos. Así como en aquella época todos sabían sobre la pelea de Grondona y DAP y se veían los arbitrajes que perjudicaban, en aquella oportunidad fue muy alevoso y estoy seguro que fue intencionalmente. De la misma forma, en esta ocasión todos saben que hay un beneficiado pero hay un mensaje que Angelici, Tapia y/o Macri quisieron dar (probablemente para el partido por la supercopa). En aquella ocasión no se cobraron 6 penales (uno tan claro que nadie pudo explicar porqué no se cobró), en esta ocasión hubo un penal clarísimo, una posición adelantada evidente, una expulsión que ni siquiera era necesaria verla, inventó un tiro libre casi en el área chica, no adicionó tiempo a pesar de la alevosía de los jugadores mendocinos, le inventaron una posición adelantada a De la Cruz cuando se iba solo a enfrentar al arquero...).
Siempre junto a la pelota...

Cuando Gallardo habló de la guardia alta, imaginé que le hablaba especialmente a los dirigentes y a sus jugadores, a los primeros les pedía que esten atentos a cualquier avivada y a los segundos que debíamos jugar mucho mejor que los rivales para que los ¨errores¨ que sucederían no afecten la forma de jugar ni los puntos que se obtendrían. Lamentablemente los dirigentes no hicieron mucho en este tema hasta ahora y el equipo no aparece. Lo que más me preocupa es como inciden estos mensajes en la mentalidad de los jugadores, así como aquella vez el equipo se cayó anímicamente, espero que esta vez el equipo se una y entienda que debe jugar en inferioridad númerica, que tendrá que hacer varios goles más que el rival para no sufrir las injusticias. Para estos casos solo hay 2 reacciones, caerse ante la arbitrariedad y sentirse frustrados o intentar fortalecerse y no dar chances a que les ganen (se perderán algunos puntos injustos pero se debe seguir sumando).

Ayer el equipo tuvo un pésimo primer tiempo más allá de un penal demasiado claro no cobrado y de un gol rival en clara posición adelantada. Así y todo se terminó perdiendo 2 a 1 ese primer tiempo y al inicio del segundo se logró empatar. Como dijo Gallardo, era un partido que se presentó como para perder por mucho y se terminó empatando, se jugó muy mal pero se terminó empujando con ímpetu. El equipo no encuntra juego, no encuentra intérpretes porque la mayoría está en un pésimo nivel y los errores de unos no son salvados por otros. Dependemos de inspiraciones individuales porque el equipo no funciona. Se busca por los laterales pero quedan muchos huecos en defensa y nadie desborda, razón por la cual la pelota siempre vuelve hacia atrás. Las defensas rivales son bloques que no son penetrados. Faltan las sociedades y falta el trabajo en bloque, no alcanza que un jugador vaya a marcar si no es acompañado por el resto, no alcanza con que un jugador se desmarque si la pelota no le llega y no alcanza con mover la pelota de un lado al otro si nadie se anima a pasar a un defensor o patear al arco. River Plate suele tener la pelota pero no patea al arco y a veces ni siquiera genera peligro.
El primer grito de gol, tuvo rebotes y desvío pero era muy importante

Ayer Armani volvió a salvar el partido sin hacer ninguna atajada espectacular (sale rápido y es muy decidido), la defensa no coordina, se mueve alocadamente detrás de los delanteros intentando tapar huecos donde está la pelota pero nadie marca al hombre que viene de atrás. Las espaldas de Saracchi y Montiel son grandes huecos que deben cubrir Maidana y Martinez Quarta. El primero no cometió grandes errores pero el pibe tuvo una pésima tarde (un desastre con la pelota, no dio un pase bien). En el medio Ponzio no se acomodó bien con Zucculini pero en el segundo tiempo impuso su personalidad y el nuevo jugador empezó a animarse un poco más. El que volvió a mostrar mucho de lo que podría hacer es Quintero. No funcionó muy bien la dupla con De la Cruz pero ambos tuvieron excelentes momentos (el colombiano sorprende hasta a sus compañeros con su habilidad y fue fundamental en el primer gol, el uruguayo tuvo un gran desborde en el segundo gol pero chocó mucho). Adelante, Pratto peleó mucho, aún se lo ve muy solo pero le cometieron un penal, con un excelente taco dejó solo a Mora para el primer gol e hizo el segundo y el uruguayo Mora le puso muchas ganas y rebeldía (algo que le falta a muchos) como para cambiar el resultado y no dejarse llevar por la bronca.
La posición adelantada sin ningún jugador que interrumpiera la visión del juez de línea

En síntesis, todos sigue igual. Cambiaron los actores, los protagonistas esta vez fueron Baliño y Massa (un gordo impresentable que no tengo dudas que entró junto al árbitro con la única intención de perjudicar a River Plate, será tarea del periodismo independiente averigual el porqué y desde donde vienen las órdenes), se estrenó una camiseta (al fin los inútiles de Adidas hicieron la tricolor pero son tan inútiles que la espalda la hicieron blanca), se cantó contra Macri (no creo que le preocupe demasiado al presidente, hasta debe sentir cierto orgullo y lamentablemente fueron muy pocos los que privilegiaron su sentimiento por River Plate) pero la realidad es que el equipo sigue sin aparecer y a esta altura es muy preocupante.  

Por Charro.

domingo, 4 de febrero de 2018

Regalo de carnaval... gracias maestro!

Gracias maestro!!!

Cualquier comentario sobre el partido del sábado a la noche (o de medianoche) empezará con la sonrisa y la imagen del segundo gol de Scocco que nos llenó de felicidad a todos los riverplatenses (en estos tiempos modernos hay algunos amantes del fútbol que no se permiten disfrutarlo porque en lugar de ver fútbol ven camisetas). Fue tan maravilloso ese gol que opacó al primer golazo, un tiro libre clavado en el ángulo que dejó al arquero acucliyado (?), sin siquiera el tiempo para estirarse y volar. Ese hermoso gol (muy similar a uno de Messi a Rulli de hace unas semanas) es minimizado por la obra maestra del segundo gol en el cual pasó a varios defensores haciendo un slalom (en un campo de juego vergonzoso) que terminó dejando despatarrado al arquero rival para darle rienda suelta al festejo y a la obra de arte.
Un arquero con experiencia y presencia. Ojalá nos pueda dar todo lo que necesitamos

Ayer llegamos al Monumental en un horario y día extraño. Sábado 21,30 hs. no parece ser el mejor horario y el equipo con su fútbol no invitaba a hacer locuras (?). El primer tiempo pareció dar la razón a los que no quisieron ver más de lo mismo. Armani mostró algo de lo que podrá entregarnos (impone presencia, parece rápido, le gusta jugar con la pierna derecha, está muy atento para salir jugando con el compañero libre para tomar por sorpresa al rival y no se queda atornillado, no le tiene miedo al error), salió en un par de centros (salió con los puños y desactivó una jugada muy peligrosa) y eso fue lo poco que nos mostró el primer tiempo (algo del Pity y Borré peleando para que no le cobren fuera de juego).
Muy interesante jugador. Nos dará lo que nos falta?

El segundo tiempo podría haber sido similar pero hubo algunos hechos que nos dieron un respiro. El golazo de Scocco abrió el partido pero mientras pasaban los minutos (jugando mucho mejor, abriendo la cancha y poniendo mucha presión) todos pensábamos en la cantidad de veces que nos empataban tontamente. Se jugaba mejor pero aún faltaba fútbol... y éste llegó con el ingreso de Pratto y Quintero (muy bajo el nivel de Nacho Fernandez). El colombiano empezó a mostrar lo que puede darle a River Plate, es un jugador que está muy mal físicamente pero que juega mágicamente. Sus compañeros aún no comprendieron la magnitud de su magia, ellos mismos se sorprendían sin saber como aparecía la pelota en sus pies después de un amague o un taco. El colombiano le dio a Gallardo lo que tanto buscaba, algo de fantasía, ideas y fútbol para romper defensas cerradas, pases milimétricos para que entren solos los delanteros o los laterales, apilar defensores para dejar a otro compañero libre... le dio simpleza al juego (e incluso sus compañeros empezaron a imitarlo) y habrá que ver cuanto dura; ayer jugó media hora y los rivales no lo conocen, no le hicieron sentir el rigor, tampoco se anticiparon a su juego (no será fácil) y obviamente no se lo vio ahogado. No sabemos si seguirá sorprendiendo pero mientras tanto es muy interesante y gratificante verlo jugar (aunque da un poco de vergüenza su estado físico). Pratto también aprobó en su debut, se perdió unos goles (especialmente un mano a mano con el arquero y una media vuelta que pegó en el travesaño) pero mostró potencia y participación. El broche de oro fue el ingreso de Mora por Scocco. Una ovación y los más sentidos aplausos para el maestro que salía y para el querido uruguayo que entraba después de mucho tiempo a jugar en el Monumental.
Una carambola casi arma el delirio Monumental

Otra interesante nota de ayer fue la defensa. Pinola sigue tomando confianza (anticipó mucho a los rivales) y Martinez Quarta se mostró seguro y rápido (fundamental a la hora de jugar con Pinola o Maidana) cubriendo muy bien las espaldas de sus compañeros. Montiel corrió mucho y marcó muy bien (me gusta que no solo va por el lateral, también se lo ve mucho cerrándose hacia la media luna del área rival) y Saracchi tiene problemas con la marca pero muchas cosas las soluciona con velocidad e intensidad (por ahora se nota que le gusta ir al ataque y le cuesta no perder en la marca). El gran problema estuvo en el medio. Con Fernandez jugando muy mal (apático) y Perez algo perdido, se le complica a Ponzio (tiene que hacer mucho esfuerzo y desgaste físico) y a Martinez (a la hora de generar fútbol). Ponzio intenta salir jugando y defender en todos lados, Pity está mucho más participativo a la hora de correr hacia atrás y ayudar a defender pero a la hora de atacar no encontraba compañía (pero sigue intentando). Scocco fabrica como puede (ayer fabricó los goles que recordaremos por siempre) y Borré se desprendió varias veces de la marca (es movedizo y lleva marca para que Scocco tenga más espacios).

Falta mucho pero al menos empezamos a ver algo diferente, algo que nos puede ilusionar y regalarnos lo que tanto estábamos esperando. Por fin llegó el fútbol...
Por Charro.

lunes, 29 de enero de 2018

Mismo torneo, mismo equipo, mismos defectos... faltó explosión

El regreso de Mora, la felicidad de un domingo triste

Tener un presidente y un DT indiscutidos (ganado gracias a una gestión con muchos logros y varios errores corregibles), un periodismo condescendiente (que se dedican a ocultar y llenar de zalamerías a esta gestión) e hinchas complacientes porque piensan que tenemos mucho (?) y hay que ser eternamente agradecidos (como si la crítica quitara algún ápice de agradecimiento), son parte del presente millonario. 

Empezó la segunda mitad del torneo y las pequeñas diferencias que se pudieron ver fueron la de Martinez Quarta (terminó su suspensión), 25 minutos de Pratto y algo menos del regreso de Mora (que todos sienten como un milagro y como tal, cualquier cosa buena que nos regale será inesperado y doblemente festejado). Podríamos hablar de la mala suerte (?) de tener suspendido a Maidana (que no estuvo en el banco), de tener enfermo a De la Cruz, de tener lesionados a Moreira, Mayada (supuestos titular y suplente de lateral derecho), Bologna (volvió al banco), Larrondo (ya es una constante así que imagino que nadie lo estaba contando antes de abrirse el mercado de pases), Pratto tuvo una inflamación y no querían arriesgarlo demasiado, Rojas se lesionó en el entretiempo (?); podremos hablar de las buenas incorporaciones que aún no están para jugar y por ende seguiremos regalando partidos (Armani espero que juegue el próximo partido, Zucculini mañana se hace la revisación médica y Quintero llegó esta semana con varios kilos de más). El banco de suplentes tenía a Bologna (saliendo de una lesión y sin pretemporada), Lollo (mil años sin jugar y esperando que no se lesione tan pronto), Casco (que no pudo ser vendido), Rossi (al que se le buscó reemplazo porque no está en el nivel necesario), Rojas (lesionado en el entretiempo), Mora (por el que rezamos que todo salga bien) y Pratto (el jueves salió con una inflamación y lo tuvieron entre algodones además de haber hecho media pretemporada). Este es el banco de suplentes que debía darle variantes al entrenador (solo faltaban Auzqui y Palacios).
Estuvo cerca del gol pero...

En los 2 últimos mercados de pases se decidió traer calidad (a D´s gracias, ya era hora. Es cierto que se está comprando caro pero al menos abren otra expectativa y se terminará armando un plantel digno del nivel que necesita River Plate para jugar 3 competencias importantes al mismo tiempo). El problema es que el plantel sigue siendo muy corto porque nunca se reemplazó la gran sangría previa. Se fue una defensa y sus suplentes (Barovero, Mercado, Mammana, Pezzella, Funes Mori, Vangioni, Balanta, Vega) y apenas trajeron a Lollo roto, Casco (nunca funcionó), Moreira y Pinola. Se fueron Sanchez, Kranevitter, Ledesma y nunca pudieron reemplazarlos (porque trajeron apuestas). Consiguieron a Alario (único gran acierto) y Driussi se destapó pero los dejaron ir juntos cuando no tuvieron reemplazo (Scocco tuvo un semestre milagroso para darnos esperanzas).

Ahora se reanuda el torneo y River Plate presenta un equipo interesante pero muy dependiente de Perez y Martinez. A este equipo le falta rebeldía en el juego y en la reacción, carácter para levantarse después del golpe, tiene la mandíbula blanda y cualquier golpe los noquea sin poder reaccionar. Empiezan tranquilos sabiendo que haciendo lo que saben ganarán porque son superiores pero no se los ve levantarse diciendo somos superiores y lo vamos a dar vuelta cuando reciben un golpe inesperado. Futbolísticamente el único que hace algo diferente es Pity, anímicamente solo Ponzio y antes Maidana (ayer pareció que Pinola puede tomar esa posta) eran capaces de empujar (pero no lograban que el grupo fuera convencido a empatar y ganar un partido). El equipo 2014/5 se sentía seguro atrás pero las pocas veces que recibía un gol sabía que podían darlo vuelta. El equipo que vino despúes nunca tuvieron esa convicción ni seguridad. Esa convicción es grupal e individual. No hay juego, no hay explosión, no hay profundidad, no somos temibles en el área rival, no somos un muro abajo (pero podríamos tener todo eso...). Así se explica estar a 18 puntos y haber logrado apenas una victoria en 10 partidos (al margen de otras explicaciones como priorizar otros torneos...).
Pratto debutó pero estuvo muy lejos del gol

Ayer River Plate jugó con Lux (no tuvo mucho trabajo y recibió un gol de penal), los 4 defensores mostraron muchos aciertos y errores (no lograron mostrar la seguridad y concentración del domingo pasado) pero en el medio se los vio poco activos. Ponzio estuvo desorientado (creo que sufrió un golpe en el pie y eso lo tuvo a mal traer) y Perez tuvo una mala noche. Al equipo en general se lo vio muy incómodo, molesto y la reacción en lugar de ser de rebeldía fue de empecinamiento y malestar por las decisiones del árbitro. Se notó mucho en Perez (totalmente desaprovechado, tal vez no esté listo fisicamente para una entrega mayor pero juega muy atrás y con poca participación, tal vez debiera ocupar el lugar de Nacho y dejar su lugar a Rojas), en el Pity y especialmente en Scocco. Las amarillas que recibieron no fueron por el juego sino por faltas tontas o protestas (especialmente la que recibieron Saracchi y Scocco). Pity se enojó porque no lo dejaron patear un tiro libre, porque Borré no corrió para ser el receptor de un pase, porque lo marcaban 4... Scocco chilló porque no podía meterla, porque Borré no aprovechó que quedó solo... Todos estaban molestos pero nadie encabezó el ataque. Nacho Fernandez hace rato que no aporta demasiado (pero tampoco tiene reemplazo), Pity tuvo momentos muy interesantes pero luego chocó con su mal humor, Scocco se fue molestando cada vez más y Borré estuvo muy cerca de marcar (tuvo 3 chances muy claras y 2 fueron muy bien tapadas y otra erró muy feo) pero nadie mostró el camino o la esperanza (tanto es así que en los últimos minutos Pinola y Montiel fueron los que más se animaron a llegar y sorprender). Gallardo intentó dar un cachetazo que los sacudiera con el ingreso de Mora y Pratto (por Borré y Fernandez) pero tampoco se logró demasiado (apenas se logró se más profundo por las bandas pero sin precisión).
Tuvo muy buenos momentos y luego se encaprichó

Más allá de la amenaza de bomba (el partido empezó 2 horas tarde), del cobro del árbitro (imposible que haya visto el penal; lo imaginó o supongo que alguien se lo dijo por el audífono) que tranquilamente podría haberlo pasado por alto (estaba tapado y la falta fue desde un ángulo que solo lo pudo tomar una cámara), de la mala suerte con las faltas, de la necesidad de acoplar a la gente que recién llega, del intenso trabajo que se debe hacer; habrá que pensar en como corregir la falta de fútbol, la falta de reacción y como solucionar los esquemas ultra defensivos cerrados y ordenados que dejan pocos espacios. Hay que recordar que quedamos a 18 puntos de la punta del torneo (faltando apenas 45 puntos y debiendo jugar otros 2 torneos en el medio) y que la clasificación para las copas ya están quedando lejanas (en este momento ni a la Sudamericana clasificamos).

Encontrar identidad, hacernos fuertes desde lo anímico y futbolístico será fundamental para levantar y tener chances en la copa y en clasificar para futuras copas. Sabemos que los árbitros harán de las suyas, los rivales cada vez se cerrarán más y la presión cada vez será mayor si no se empieza a jugar bien y ganar. El grupo tendrá que aprender a rebelarse y levantarse después de cada golpe porque nadie les regalará nada. Más vale aprenderlo pronto.

Por Charro.