Desprotegidos

Urgente necesitamos esperanza y motivación para avanzar positivamente

Si en el posteo anterior hablé de la soledad y falta de apoyo que sienten los jugadores, es bueno hablar ahora de la desprotección y desilusión que sentimos los hinchas. La gestión de Aguilaucha nos dejó golpeados y desconcertados, mientras que el descenso nos dejó shockeados, lo mínimo que necesitábamos era una contención desde la dirigencia (y hasta de los medios y del gobierno). El enojo/agresividad interminable que hay hoy en el ambiente es la ebullición proveniente de los hechos del pasado sobre los que no tuvimos capacidad para reaccionar. El fanatismo de algunos por alentar y no permitir la crítica o el de otros por querer que este presente sea ya como el pasado pero con las herramientas del presente, es la respuesta de algunos ante la falta de horizontes que vive River Plate. Ambos grupos se creen y necesitan ser los salvadores de este presente porque, como todos, no soportan lo que estamos viviendo y piensan que si las respuestas no vienen desde la dirigencia, es hora de que sean ellos quienes actúen. 

No tener una dirigencia que represente realmente al hincha ni nos conduzca dignamente provoca que aparezcan estos grupos pseudo mesiánicos fanatizados. La última elección (así como las anteriores se la dieron a los anteriores gobernantes) les dio legitimidad a los presidentes pero a partir de lo que nos tocó vivir, sería bueno empezar a estudiar la necesidad de pedir un referéndum para ocasiones excepcionales o traumatices (como lo fueron la última posición en el torneo, el descenso o la venta/vaciamiento del patrimonio de la institución). La falta de respuesta legal/institucional a las estafas o decepciones más allá de lo tolerable, son las que nos llevan al grado de agresividad y de impotencia que provocan que cualquier respuesta parezca válida. La forma en que deambula el hincha como si fuera un sonámbulo en medio de un terremoto, es parte de la patética situación que vivimos. Cualquier dirigente digno hubiera dado un paso al costado para dejarle el puesto a una persona mas capaz (no lo digo solo por DAP, también lo pensaba por Aguilaucha en el 2007). Cuan diferentes serian las cosas con un presidente que intentara encausar este desastre con la autoridad que le darían los votos y el estar afuera de el desastre pasado. 

Cuando alguien menciona a DAP (mas allá de que alguno piense que es heredero del desastre y que no es culpable del presente), es imposible eludir la división de aguas que provoca en el hincha/socio y su falta de manejo en las situaciones que se le fueron planteando. Un buen dirigente sabe cuando debe dar un paso al costado por el bien de sus dirigidos. Supongo que es tan grande el ego del Káiser que no se atreve a ver su fracaso (o es tan grande el negocio que no puede dejarlo). Aguilaucha no quiso tener un segundo mandato (no era tonto, sabía lo que se avecinaba en lo económico y si se lo tiraba a otro tendría la posibilidad de volver como salvador) pero no tuvo ningún temor en ¨ejecutar¨ al club cuando empezó el segundo mandato. La obsesión por no ser un radical que no termina su mandato (expresión suya que deberìa haber sido motivo para que los radicales lo echaran del partido), lo llevaron a hundirse/nos cada dìa un poco màs sin preocuparle el daño que nos hizo.

La falta de dirección del club se evidencia en la vivencia y sentimiento que tenemos cada uno. La reacción violenta en muchos casos es una cuestión política y en otros será su forma de ser pero lo que no puede eludir un presidente es el sufrimiento de toda su gente (no hay un hincha que este viviendo bien este proceso de los últimos 5 años). Puede un presidente seguir buscando respuestas después de 1 año pero no pasados 30 meses, puede un presidente haber fallado en algún punto pero no puede haber fallado en todos. Hoy River Plate está en el Nacional, sin haber conseguido el fideicomiso, sin logros deportivos, sin entendimiento político con ninguna agrupación, con violentos que dañan a la imagen del club, a los demás socios y que provocan miedo y muertes por todos lados. La lista de fracasos es larguísima y es ahí donde debemos entender nuestros fracasos.

Para el futuro es urgente buscar soluciones inmediatas para no caer en estos traumas que tanto cuesta sobrellevar. El dolor no nos lo sacará nadie pero si podremos impedir que nunca màs nos vuelva a pasar. Ahí es donde debemos apuntar.

Por Charro.