Ni siquiera 25

 Lamento que no haya sido la despedida que todos esperábamos

Fuimos al Monumental con la idea de dar aliento al equipo y darle una palmadita en la espalda para reencontrarnos en 3 meses con un equipo renovado y tan entusiasta como estuvo en este último mes y fuimos con la idea de darle una despedida llena de gratitud al muñeco Gallardo, tal como había pedido Almeyda cuando renovó su contrato.

50 mil personas fueron ilusionadas a ver a un equipo que esperanzaba e ilusionaba, un equipo que se reencontrado con su historia pero todas fueron ilusiones que se resquebrajaron en los primeros 15 minutos. Fue un pasaje de retorno al infierno. Como en los últimos años el equipo demostró falta de jerarquía, el partido que todos esperábamos, el partido que había que ganar, se perdió en pocos minutos. Lentamente vimos como un error se traducía en una sucesión interminable de errores, el rival pasaba a cabecear por nuestra área sin pedir permiso y haciendo lo que querían. Avisaron antes del gol y luego no perdonaron, si la pelota estaba en el aire, seguro que era empujada por un cuerpo de Tigre. Otra vez se vio a un equipo sin ideas, desorientado, timorato, muy desordenado y desequilibrado y fundamentalmente sin reacción. La taba se dio vuelta otra vez pero ya no fue por una cuestión de suerte, esta vez la dimos vuelta nosotros haciéndole un regalo al rival. Lazzaro y Luna se hicieron un festín y dejaban huecos para el ingreso vertiginoso de algún mediocampista.

Un partido en el cual todo salió mal, la palabra que más se escucha es inesperado, nadie puede creer lo que pasó ayer, ni siquiera los de Tigre que por primera vez en su historia lograron vencer en el Monumental. Pésimo partido de varios jugadores y hasta los que andaban en un nivel superior, ayer no rindieron (fue el peor partido de Ferrero desde que llegó a nuestro club), no hubo respuestas dentro de la cancha y hasta Cirigliano que corría por todos lados se fue desdibujando y poniendo muy nervioso. Este chico puede tener un gran futuro pero ayer fue la síntesis de la actualidad millonaria. Corrió, tuvo ganas, tocó, mordió pero cuando nos hicieron los primeros goles no tuvo reacción y los minutos lo llevaron a dar mal los pases sencillos. Almeyda podrá correr 10 veces menos pero tiene una claridad conceptual infinitamente superior, hace los relevos de taquito, ordena la defensa, intimida con su presencia e impone respeto dentro de la cancha, conversa a los árbitros, empuja al equipo, no le pesa ni la camiseta ni la situación. Esta es la clase de jugadores que estamos necesitando como sostén del equipo.

Es una pena que las cosas hayan salido tan diferentes a como las soñamos antes de salir de casa. Si hasta la segura participación y despedida de Gallardo se vio frustrada por la lesión de Ferrero (esperemos que no sea nada grave) y Cappa debió salir a disculparse. De todas formas, el muñeco recibió el cariño de los hinchas (y la ingratitud de la barra violenta) y se pudo ver su emoción.

Fuimos a una fiesta y nos encontramos con otra decepción, fuimos a hacerle un regalo de despedida al muñeco y nos volvimos con el regalo en las manos, fuimos a festejar y nos volvimos calientes y muy preocupados. Supongo que este partido habrá servido para que todos entendamos que la situación no es tan sencilla y que no habrá que dormirse en los laureles porque nadie nos regalará nada. Por un lado hay pibes que saben tocar la pelota, hay un técnico que tiene una idea clara de juego y que la transmite con facilidad, la gente alienta y podemos ejercer mucha presión en el Monumental pero por el otro lado no hay plata para reforzar a un plantel que necesita unos cuantos jugadores de categoría, el técnico erra mucho con los cambios y está encasillado en la estrategia, la gente está muy nerviosa y pretende que se hagan las cosas como si tuviéramos a Messi, Kaká, Cristiano Ronaldo, Xavi, Iniesta e Higuaín en el equipo, no se tolera una mala jugada o una buena jugada que no llegue a buen término, se presiona a los pibes sin importar qué estén haciendo, se toma el pelo a los que no le salen las cosas por más que se sepa que no hay nada mejor para reemplazarlos. El panorama no es el mejor pero todos esperamos que la grandeza de ser River Plate supere todos los inconvenientes.

Se vienen meses complicados y espero que todos estemos a la altura de las circunstancias. No nos olvidemos que el próximo campeonato ya se empezó a jugar. No empezará en la primera fecha, empezará con una tabla de puntos tatuada durante 12 meses y con la compra de jugadores durante estos días.

Por Charro.