"Se pueden arreglar campeonatos enteros, como el de Boca de Ischia." Javier Ruiz árbitro "Ehhehh, eh yo pienso de que ehhehh eeeehh (?)." DAP "No estén cagados." Daniel Passarella

jueves, 16 de diciembre de 2010

Idolos de siempre XIII: El comienzo de las burradas

 
El 14-12-91 se presentó ante los hinchas, cuantas cosas nos pasaron en este tiempo...

Las circunstancias y las decisiones van convirtiendo a un muy buen jugador en ídolo o a un jugador muy querido le van quitando la posibilidad. ¿Quién duda que si hoy volviera D’Alessandro, se quedara por 6 años, fuera la voz cantante del grupo y nos llevara a un título internacional no sería el ídolo de esta época? ¿Cuántas oportunidades tuvo Saviola de volver y tener este recorrido? ¿Enzo hubiera sido ídolo si no hubiera vuelto al club y hubiera salido campeón de América? ¿Y Ramón? ¿Labruna hubiera sido el ídolo máximo si no hubiera sido el entrenador del 75? ¿Si en algún momento JJ nos convierte en campeones, revertiría la imagen que tenía hasta hace unos meses?

En medio de todas estas preguntas, vale recordar los inicios de nuestro último ídolo millonario. El 14 de diciembre de 1991 debutaba el Burrito Ortega en la primera de River. Lo hizo frente a Platense, a 2 días de haber salido campeón del apertura de dicho año. Fue un campeonato raro, el River del Káiser fue muy superior a sus rivales y pudo haber sido campeón invicto faltando 5 fechas (12 victorias y 2 empates) pero una derrota frente a CASLA en Velez (uno de los partidos con más lluvia) llevó a una definición extraña. El 12 de diciembre los bosteros perdieron en La Plata antes de que jugara River en el Monumental frente a AAAJ. Al entrar a la cancha los jugadores supieron que eran campeones, dieron la vuelta olímpica, fueron derrotados por el bicho y volvieron a dar la vuelta en medio de la algarabía Monumental. Todo el mundo estaba pendiente de la fiesta y ya nada importaba.

Sin embargo a los 2 días se siguió por compromiso con el torneo y para muchos también siguieron los festejos. Este River de Pasarella era un equipo joven, rápido y contundente en ataque, mientras que dominaba al rival gracias al pressing que se ejercía en la media cancha. El Mencho y Ramón se cansaron de hacer goles mientras los pibes apoyados por algunos experimentados se ocupaban de presionar y asfixiar en todo el terreno a los rivales.

Nadie sabía que ese partido después de los festejos pasaría a la historia no por nuestra alegría sino por el debut del Burrito Ariel Arnaldo Ortega. Nadie podía imaginar que estábamos frente a un jugador diferente y que tendríamos con él una relación especial. Nuestra relación con el Burrito tiene una marca de amor, muchas veces nos enojamos con él pero siempre logró entrar en nuestros corazones. Tuvo una relación tormentosa con los dirigentes, con diferentes idas y con vueltas necesarias para ambas partes. El brillo de un jugador diferente acompañado por la simpleza, la bondad y lo introvertido que se mostraba, fueron convirtiéndolo en uno de los preferidos de sus compañeros y de los hinchas. Se fue convirtiendo en el niño mimado junto a figuras como Ramón y el Mencho o después junto al Enzo y el Matador Salas. Aprendió, gracias a los consejos de sus compañeros, a mezclar su personalidad fuera de la cancha con su talento dentro de ella; su quiebre inesperado de cintura para dejar en ridículo a sus rivales, su rapidez para subir por los laterales y descolocar al defensor que intentaba marcarlo, su vértigo cerca del área era una sorpresa permanente, era parte de la fiesta de cada domingo. Los logros personales y grupales se iban sucediendo e iban elevando el amor del hincha pero también provocaron que se tuviera que ir a Europa. Su adicción e inconducta fueron provocando sus continuos retornos en tiempos en que ya no estaban todas las demás glorias y fue ahí cuando el canto del hincha se hizo protector y se convirtió en amor eterno. Su amor por el club lo llevó a defender los colores e hizo goles maravillosos e inesperados que quedarán en nuestro recuerdo. Cuando algunos lo daban por muerto siempre aparecía esa jugada que les hacía entender a todos que podía darnos más felicidad, de esta forma, con los últimos partidos del clausura 08 selló para siempre este amor. Nadie esperaba ganar un campeonato más con ese equipo y sin embargo llegó el milagro.

El Burrito vistió varias camisetas pero en ningún lugar rindió como en River Plate, en muchos lados lo admiraron pero en ninguno se sintió tan cómodo como en Nuñez. El Burrito se equivocó muchas veces pero siempre fue “perdonado”, muchas veces fue dejado de lado pero el hincha siempre lo quiso y lo protegió. Es un hijo mimado que está viendo oscurecer su tiempo futbolístico. Es un tiempo en que tendrá que tomar decisiones, muchos ídolos dejaron el club años antes de retirarse porque no podían dejar el fútbol pero al mismo tiempo no tenían el físico para mantenerse en el nivel de River Plate. En este momento el Burrito está en esta disyuntiva y solo la baja calidad del equipo permite que Orteguita siga siendo una alternativa superadora a la hora de entrar a la cancha. A mi entender tiene varios cartuchos para regalarle a River Plate pero también es cierto que deberá aprender a dosificar su permanencia en la cancha, deberá regular su físico para entender cuando puede sumar al equipo y cuando deberá dar un paso al costado para el ingreso de un compañero.

En los últimos tiempos pudimos ver como el Beto Alonso, Pasarella, Ramón Díaz, Enzo Francescoli se retiraron en River y campeones pero no era lo habitual (Cesarini y Bernabé Ferreyra lo habían hecho) pero fueron muchos los ídolos que no quisieron irse con la mejor ola y prefirieron jugar sus últimos partidos en otro país o en equipos inferiores (Peucelle, Pedernera, Moreno, Loustau, Muñoz, Labruna, Pipo Rossi, Morete…).

Ojalá que el Burrito pueda estar en un nuevo título y se pueda retirar levantando una copa con la camiseta de River pero en caso de que no sea así, como siempre, estaremos esperando que pase lo que sea mejor para él.

Por Charro.

14 comentarios:

tony del bajo dijo...

Olvídense. El Burrito es indiscutible. Amor incondicional.
Norberto.

Enrique dijo...

Tengo la sensación que DAP ya le bajó el pulgar. Fijense los refuerzos que se mencionan: Aimar, D´Alessandro, Belluschi; aunque sea dificilísimo que se pueda concretar alguna de esas incorporaciones, todos ingresarían por el Burrito, o van a tapar a Lamela?

El Burrito es al jugador que más quiero de todos, una pena que no pueda aceptar tener un rol un poco más modesto en el equipo, sería de mucha mayor utilidad.

millonaria dijo...

Concuerdo con Enrique es una pena pero esperemos a ver que pasa.
Hablando de malas noticias dicen en otros blog que el año que viene se nos va el que para mi fue el responsable mayor de terminar 4º y no ultimos???
Ojala sea solo un rumor mas pero se va FERRERO me muero yaaaaa.

charro dijo...

JJ dice que la columna vertebral está y que solo hay que reforzarla. Si se va Ferrero, no la estaríamos destruyendo? Es toda una preocupación.

El Burrito tiene contrato así que espero que siga y que acepte jugar algunos minutos o jugar en partidos especiales.

Veremos que pasa con el burrito también.

Anónimo dijo...

Estupenda nota Charro. Un aporte nada más: Ramón Díaz concluyó su carrera en Japón, mientras que Peucelle sí lo hizo en River Plate. Vale también un párrafo para Mostaza Merlo, que a los 34 años prefirió colgar los botines antes de jugar con otra casaca. Sólo lució la banda roja al cabo de casi 500 partidos.
En otro orden debo decir, que a veces la vida nos pone en lugares que nos permiten atesorar ciertas observaciones y que el paso de tiempo coloca en su justo lugar. En aquel momento, y como consecuente seguidor de las inferiores, veía en Ortega a un futuro crack. Debo admitir que con otros me equivoqué. Pero el jujeño era, y sigue siendo a pesar de todo, de esos futbolistas que nos obligan a ponernos de pie cuando arrancan la jugada. Era tan electrizante en inferiores como en primera. Desfachatado. El espejismo de Houseman, otros hablaban de Rojitas, pero al final fue Ortega. Considero que los fenómenos, son aquellos que juegan más en primera que en inferiores. Es el caso de Saviola y D'Alessandro por ejemplo. Pero Ortega fue la excepción. Siempre fue fenómeno. Siempre la pidió, jamás se escondió. Eso es tener huevos. No pegar patadas. Siempre quiso jugar. Y el repaso de sus expulsiones así lo demuestran. Fastidiado por recibir golpes, o por protestar a algún juez que no impartía justicia. Potrero puro y en su máxima expresión. Pasarán los años, muchos quizás, y como hoy nos hablan de Moreno, Walter Gómez y tantos otros, aquellos que tuvimos el privilegio de verlo en acción, lo ubicaremos en el sitial que se supo ganar y le corresponde: un grande de fútbol argentino. Y para este caso estarán los testimonios fílmicos, que no nos dejarán mentir.
SR. RIVER PLATE

dalmassito dijo...

Me acuerdo ese día que debutó.

Sabado a la noche. Independiente. 1-0 a Platense.

Lo escuche en casa por Radio. No se si fue Titi o el chavo Fuck que dijo "entra en River un pibe de jujuy. Se llama Ortega". Yo estaba con un grupito de amigos boludeando. Se reían cuando les dije: "Ese es un fenomeno".

Yo lo habia visto en la reserva de un partido River Huracán de ese año. Era increible.

Ademas de todo lo genio que fue. Es el jugador con mas huevos que yo vi llevar la camiseta de River.

Como dijo alguien alla arriba. Amor incondicional.

Es una lástima que el fútbol lo esté dejando a él, y no él al fútbol.

abrazo.

Anónimo dijo...

Otro gran recuerdo , Charro .

De esas fechas misteriosas que se revelan con el tiempo .


Para mí el GRAN partido del Burro fue en Japón , en otros memorables el equipo siempre acompañaba pero allá salvo Bonano , él solo se cargo al hombro la responsabilidad de jugar a lo que nos jugábamos , ni Enzo , ni Ramón estuvieron a la altura , fue muy frustrante y aunque hubiéramos perdido igual , Orteguita mereció meter esa que se le fue apenitas , por todo lo que jugó ese día de malas ...

antes y después hubo montones de grandes momentos como cuando Enzo le paró su cambio a Ramón , el 3 a 0 en la Boca del campeonato invictus , los regresos , el 2008 ...



El amor incondicional está , la disyuntiva me gustaría o debería ser , que no se le baje el pulgar .

No creo que le convenga a DAP , ni a River aunque sé de muchos riverplatenes que le bajaron el pulgar hace rato

en la cancha no es así y para muchos más , incluido , no es así


el tema es apañarlo para que entienda que desde el capricho no va a aportar lo mejor


en la cancha me llamó la atención que Lamela lo ignore
y personalmente creo en su calidad para aportar como refresco , con espacios en partidos apropiados a lo que puede dar hoy , sin nostalgia

hoy sus pases para habilitar siguen siendo los más profundos pero no en la cantidad de un equipo de primera


hoy Lamela está en la palestra , no hay que olvidar que hizo algunos pases gol el Burrito , el del triunfo a Tigre , el gol a QAC , el que hubiera sido triunfo en Mdza. , una actuación importante con Boca

poco pero en un deporte de equipo el genio de Ariel sigue estando ahí , lamentablemente él no es una persona metódica y calculadora como para darse cuenta solo , ser díscolo es parte de lo que lo hacía indescifrable y nunca cambió


pero no nos engañemos , amados y todo los ídolos populares de su estampa necesitan un entorno íntimo que los proteja , tanto amor es fenómeno en las buenas y no nos vamos a olvidar de él pero lo que él necesita tiene que estar en su familia y amistades ...


DAP siempre lo quiso , una cosa es que no sea titular y otra borrarlo , esperemos que sea lo primero , espero que siga siendo su "padre" futbolístico y no le suelte la mano .




abrazo , Jorge

Anónimo dijo...

Burrito siempre vamos a estar con vos!!

charro dijo...

Es cierta la acotación SrRP. Una de las grandes dudas que tengo sobre el fútbol es porque hay tantas figuras en inferiores que no logran triunfar en el fútbol y otras que pasan sin demostrar sus habilidades en las inferiores terminan triunfando.

Ortega tiene todo para triunfar y por eso lo consiguió. Su habilidad, sus ganas y sus huevos son una fórmula genial.

charro dijo...

Que suerte tuviste Dalmassito de haberlo visto antes. Yo también recuerdo algunos partidos de reserva pero hubiera disfrutado más si lo hubiera podido ver en inferiores. En aquella época no podía ver los partidos de inferiores y me lo perdí. Tiene un sabor especial cuando uno reconoce a un pibe y después termina siendo un grande, las alegrías que da tienen un sabor doble.

Jorge, el Burrito tiene muchas páginas gloriosas y es cierto que demostró que su techo era enorme cuando jugó la final del 96. Hubiera sido genial que no hubiera sufrido tanto por su adicción y tal vez hoy todavía hubiera seguido haciendo maravillas. Ojalá se de lo mejor para él.

Anónimo dijo...

Resultará imperdonable para la historia de River Plate, que las inferiores se hayan mudado a Ezeiza. Cargo a sus dirigentes y a los socios que lo permitieron. La "crianza" debe ser en el Monumental como era entonces, cuando Ortega era nada más que el jujeño, sacaba conejos de la galera y nos deleitaba con su fútbol atorrante. Después un cappuccino a la italiana en la confitería de los billares, y discutir con la barra, quienes podían llegar y quien no. Sábados inolvidables.
Charro: duda despejada. Los cracks son buenos en inferiores, pero mejores en primera. Otros quedan en el camino por la influencia negativa de sus padres, la falta de condiciones, o simplemente porque se dieron cuenta que no nacieron para el fútbol. Ocasionalmente una lesión.
Fue el caso de Mallea, clase '81. Desde infantiles se destacaba por encima de Saviola y D'Alessandro. Sin embargo, una lesión ligamentaria en un entrenamiento del seleccionado, luego de un choque con el arquero Cavallero, de algún modo frustó su carrera. La historia de los otras dos, que en ese entones "acompañaban" con gran calidad es más conocida.
SR. RIVER PLATE

Enrique dijo...

Recuero al mendocino Figueroa, goles todos los partidos, se lo mencionaba con el futuro crack goleador de River y nunca pasó nada.

Matias dijo...

No puedo ser objetivo. El Burrito es tan buen jugador, tan buen tipo…
Creo que nos llega tanto por eso. Que es un grandioso jugador, no hay dudas. Que aún le quedan destellos de esa magia, tampoco. Pero además, Ariel nos puede por cómo es como persona. Con sus defectos, enfermedades, adicciones, todos sabemos que es un gran tipo.
Al respecto, les recomiendo conseguir el programa en el que repasa su vida en ESPN con Fantino (ese programa de reportajes que hacía contando la historia de sus entrevistados, probablemente el mejor programa que hizo el salame ese). Si lo ven y no se enamoran del Burro, créanme, no son de River y probablemente ni siquiera les guste el futbol.
A mí, la verdad, a esta altura, poco me importa el futuro deportivo de Ariel. Lo único que quisiera es que sea feliz, que se recupere o al menos que lleve lo mejor posible sus problemas. Si eso implica jugar, que lo haga. Si implica no entrar más a una cancha, entonces hagámosle el partido homenaje que se merece y dejémoslo en paz que (re)haga su vida y sea feliz.
Gracias por todo, Ariel. Los verdaderos hinchas de River estamos con vos, siempre.

charro dijo...

Que buen tema el de las inferiores, en algún momento haremos algún posteo. Tiene muchas aristas y SrRP nos tiró varias puntas y sabe del tema así que hará muy interesante escribir sobre el tema.

Leer a los jugadores consagrados cuando cuentan sus experiencias en las inferiores casi siempre es doloroso.