El segundo escalón y el gusto de algunas vueltas

Muy buenos refuerzos llegados del Tomba que tuvieron doble festejo, ojalá sigan teniendo un gran torneo.

Este fin de semana largo le dio a muchos la oportunidad de seguir sin mayores problemas a River Plate hasta Mendoza. Que bueno es gozar del fin de semana largo en tranquilidad y con una sonrisa en la cara. Una alegría inmensa que el fútbol argentino se haya dado el “lujo”de volver a vivir la fiesta del fútbol. ¿Que mente afiebrada puede insistir que la solución a la violencia pasa por tener la cancha vacía y en silencio? ¿El fútbol argentino se puede privar de la fiesta que brinda la gente de River Plate? ¿Los colores y los cantos de una hinchada incitan a la violencia? Si todo esto tiene una respuesta afirmativa hay que empezar rápidamente con la terapia y la educación porque Argentina está muy mal.

La cuestión es que  por otro hecho anecdótico (la pelea entre Vila y Grondona) es posible que el público visitante vuelva a poblar las tribunas y se pueda volver al espectáculo del fútbol con 2 hinchadas alentando a su equipo.

Para empezar, me alegró que el nivel de la TV pasó de insoportable a interesante, me alegro que no esté la dupla Araujo/Ricardo y también que no hayan arreglado con Closs, ahora por lo menos se pueden escuchar los partidos sin castigar a la gente que no puede ir a la cancha. Me alegro fundamentalmente de que no haya habido violencia (el panorama no era el mejor, la policía mendocina es conocida como una de las peores, del padrino se podía esperar cualquiera cosa, de las barras ni hablar...) y que no haya habido motivos para que los dirigentes se siguieran vanagloriando de la violencia.

Por fin un sábado para festejar. Volvieron los hinchas, volvió la fiesta, volvimos a acercarnos al fútbol que pretendemos los hinchas de River Plate, el festejo de gol de los jugadores frente a sus hinchas, hinchas gritando en la cancha y no en una casa... volvimos a usar el pantaloncito negro (para muchos un hecho menor que no lo es tanto, es parte de los colores del jugador de River Plate), volvimos a ganar por 2 goles de diferencia, a dar vuelta un partido y hacer 3 goles después de más de 20 partidos, volvimos a identificarnos con el equipo (el hecho de que esten el Chori y Cavenaghi es fundamental). Son varias cosas para esperanzarnos pero esto sin olvidar que recién empieza. Es un torneo largo (los hinchas nos desacostumbramos), donde suele haber rachas positivas y negativas (normalmente el campeón es el más regular durante el torneo) y donde suele haber lesionados que obliga al recambio permanente.

Este torneo demostró que tiene algunas características diferentes, hay que cuidarse mucho de las pelotas paradas, no hacer faltas cerca del área, todos tienen un delantero molesto que si tiene una buena tarde hace estragos, se pega sin asco y los árbitros lo permiten (lo que pegó hoy Paez en Chacarita fue animal y lo que sufrió ayer el Chori fue increíble), esperemos que la TV permita que los robos a los visitantes (otra aberración por no haber público visitante) no sean tan alevosos.

Muy buen salto del pibe Ocampos. Esperemos que Almeyda lo sepa llevar.

Este River Plate está mostrando que los refuerzos y recambio fueron importantes, Sanchez le está dotando al equipo de aire, claridad con la pelota, es punzante (tanto en los pases como cuando encara al arco) y solidario, Aguirre es aguerrido y conoce del sacrificio en el medio, Ocampos con sus 17 años demuestra que no le pesa tanto la responsabilidad, encara sin miedo, es habilidoso y fundamentalmente, es inteligente al jugar, a Domingo le falta pero no desentona (no olvidemos que está muy solo en el medio), hay momentos del partido (nos pasó en las 2 fechas) en que nos vienen en tromba y no podemos frenar al rival (son 15 o 20 minutos de zozobras), habrá que ver si el Lobo lo mejora. Abecassis es otra buena sorpresa que nos dio Almeyda (gran mérito en la confianza que le dio a los 2 pibes), todos deben recordar las cosas que se dijeron cuando llegó este pibe, se habló que era un negociado para tener a un pibe en la reserva, que no se podía jugar con el prestigio ni la plata del club… no es la octava maravilla del mundo pero cumple bien con su función y el nivel de los laterales argentinos, es flojo en la marca pero sube con criterio, velocidad y habilidad, para este equipo de River Plate es muy importante. A diferencia del torneo pasado, este equipo necesita proyectarse ofensivamente para aprovechar sus fortalezas (el Chori y Cavenaghi), defensivamente ya no somos tan fuertes y ofensivamente somos peligrosos.

Habrá que hablar mucho con el Chori y con la escuela de árbitros, habrá que hablar con Alayes (está lento) y con Maidana (fue bajo su nivel mientras jugó), habrá que hablarle mucho a Chichazola (todavía está afectado por el gol de Velez) y especialmente a los defensores que tienen la maldita manía de darle todas las pelotas al arquero para que las revolee (al pedo, este es un último recurso para que no nos saquen la pelota con peligro pero nuestros defensores lo usan para sacarse la responsabilidad y pasársela al arquero), habrá que corregir algunos inconvenientes pero es bueno saber que estamos en la buena senda y que se puede mejorar mucho.

Lo importante será no relajarse. El nivel es muy parejo y los equipos de menor categoría (supuestamente Independiente es uno de ellos) demuestran que son peligrosos. Nuestro próximo rival estaría entre los de mitad de tabla y no fue menos que Chaca, lleva mucho peligro con pelotas paradas y su 9 pronto jugará en primera división. Acostumbrémonos a que no hay partidos fáciles y que todos sabran lastimar (ya sea con patadas o con delanteros luchadores y rápidos).

Así es. Un largo y difícil camino que empezamos con algunas alegrías.

Por Charro.