Remolinos de odio

Destrucción en lugar de construcción. Una necesidad muy moderna.

Lo bueno y malo de twitter y algunos blogs está en la libertad para expresarse, dentro de esa libertad podemos encontrar cosas que llenan el alma y jamás hubiéramos soñado encontrar o barbaridades inentendibles. Dentro de estas últimas tenemos a los grupos que solo agreden y destruyen porque no saben hacer otras cosas y aquellos que encuentran un lugar para escupir parte de su odio. 

Internet se ha impuesto como medio de difusión y conocimiento lo cual es muy peligroso para aquellos que manejan estructuras de poder o que pretenden hacerlo sin la capacidad para llegar al poder. Ante esta situación, no les queda más remedio que ingresar a internet y destruir la credibilidad o el conocimiento de los otros. Sabemos que en las últimas elecciones del club hubo grupos que contrataron gente para inducir a la gente por medio de llamadas telefónicas y de ingresos agresivos y destructivos en foros importantes. La aparición de gente pesada de la política nacional (que ocuparon cargos de mando político en la policía y en el ministerio del interior como Nosiglia y Alvarez) demuestran que los métodos eleccionarios estuvieron ensuciados sin piedad y que estos métodos, lejos de desaparecer, estan perfeccionándose y aprovechando el odio subyacente en la política diaria del club.

La concientización del saqueo y el daño económico, deportivo, institucional sufridos por un lado y la política de aislamiento y el descenso por el otro, llevaron a diversos grupos a movilizarse y/o a canalizar su odio hacia distintos lados.

La agresividad que despertará en la política una vez ascendidos (D´s quiera que sea en junio) será terrible, hoy todos estan agazapados a la espera de volver a nuestro sitio y por eso nadie quiere moverse demasiado aunque falte año y medio para el próximo acto eleccionario. La aparición de gente que querrá hacerse conocida y posicionarse de cara a las próximas elecciones será el puntapié para la nueva etapa política del club.

De todo esto, lo que más me sorprende son los personajes que ingresan a los medios para insultar o denigrar a nuestra gente que no estuvo en cargos directivos ni fue parte influyente en las políticas llevadas a cabo por la dirigencia elegida por los socios. Está claro que el anonimato permite el ingreso de bosteros que necesitan expresarse en un blog de River Plate como parte de su complejo y de su insatisfacción con la bosta pero eso no quita a otros grupos (ojalá que sean minúsculos), que necesitan repartir su bronca. No puedo entender a gente que denigra con felicidad a Almeyda, a Cavenaghi, al Chori (mucho menos lo deben entender ellos). No entiendo el desagradecimiento como sentimiento. Estamos hablando de gente que decidió brindarse al máximo de sus posibilidades porque así lo sentían y chocan contra la barbarie de gente que no logra aceptar como un hecho de la realidad el descenso y por ello necesitan agredir a todo lo que está alrededor.

Almeyda es un DT voluntarioso y con conocimiento del grupo que maneja y del club donde está está, tal vez muy poco para el momento inédito que vive River Plate pero más que suficiente para que no hayan insultos justificados. Hay decenas de errores que hemos marcado todos en las charlas de amigos, muchos han pensado que distintos momentos del torneo que era hora de traer a alguien más experimentados pero la ceguera de no querer reconocer los aciertos demuestra el odio que despierta en algunos el descenso. Llamarlo el capitán del descenso (más allá de lo real e injusto) es parte de la ingratitud hacia un tipo que se brindó y brinda al máximo más allá de sus limitaciones. Cavenaghi y el Chori pueden jugar mal (como cualquier jugador) y pueden cometer errores graves pero decidieron meterse en medio del incendio para apagarlo con sus baldes de agua sin saber con cuanta ayuda contarían y cuanto arriesgarían sus carreras.

 

El enojo de esta gente puede llevar a que se insulte a jugadores como Ferrero o Gerlo cuyo pecado fue no tener la calidad a la que nuestro club estaba acostumbrado pero, al brindarse al máximo lograron el reconocimiento popular y eso pareciera imperdonable. La gente aplaudió a estos jugadores por la entrega en momentos difíciles y no por ser extraordinarios futbolistas. Los hinchas del enojo no soportan que se festejen las victorias o la obtención del ascenso porque pretenden que esto se logre por la gracia divina, por el peso de una camiseta o por la magnitud del negocio que representa nuestro club pero no piensan en todo lo que se hizo mal para que todas esas cosas dejen de tener el peso para obtener logros (aunque sean menores). 

Insultar y no demostrar agradecimiento es parte de lo deshumanizados que estamos por el odio, pretender que las cosas se consiguen por el pasado y no por el presente es parte de nuestra ceguera, confundir exigencia con desagradecimiento es parte de nuestros males.

Por mi parte, agradezco a los jugadores que estan y estuvieron poniéndole el hombro a este River Plate de terapia intensiva.

Por Charro.