Una buena imagen para acallar...

Sólo faltó el abrazo de algún festejo

Durante el partido de tenis de David Nalbandian por la copa Davis, se vio a algunos jugadores de River Plate haciendo el "aguante"  a un declarado hincha millonario y que nos da orgullo constantemente. No se desde donde habrá salido la invitación pero es muy probable que David Trezeguet este con muchas ganas de vivir todas las emociones de la "argentinidad" que no pudo vivir durante tanto tiempo en Europa y este fue un buen momento.

Las primeras voces que se escucharon fueron las de "que hacen ahí y no estan entrenando". Todos los clubes entrenan en un turno un poco más largo, en 2 turnos y un par de días a la semana se hacen trabajos livianos para mantener el cuerpo y no sobre exigirlo, el caso es que era lógico que aparecieran en la cancha Mary Terán de Weiss (cuando dejarán los medios y periodistas de tenis de decirle Parque Roca? Ya dejó de ser una vergüenza para convertirse en brutalidad), los jugadores libres para apoyar a quien tantas veces los apoyó (actividades para desenchufarlos de la constante presión de los medios y el fútbol). Más allá de que algún que otro desubicado haya preguntado porqué no estaban concentrados (cuando faltaban más de 48 horas para el partido), el rédito de la imagen de parte del plantel y que estuvieran juntos en la imagen Cavenaghi y Trezeguet, muestra a las claras el profesionalismo y experiencia de estos jugadores que pensaron en primer término en el equipo y dejaron para otro momento los egos.

Como ya escribí en otro posteo, el goleador es egoísta por excelencia, pero los buenos líderes consiguen que los problemas queden dentro del vestuario y no sean motivo de desconcentración. Hacía mucho que no pasaba que nuestro plantel tuviera líderes positivos, desde el problema de Ameli y Tuzzio (en ese momento había algunos jugadores con carácter, trayectoria y habilidad) que no se ven líderes que fueran respetados tanto dentro como fuera de la cancha (esto se gana imponiendo respeto cuando se juega y cuando se está en el vestuario). Las voces de Cavenaghi, Chori, Trezeguet y Ponzio liberan de responsabilidades frente a las cámaras a otros jugadores que no estan acostumbrados a la exposición y a la presión. Estos 4 jugadores son hombres capaces de cerrar una puerta y hablar (o trompearse) hasta solucionar los problemas y decidir que estos se acaban ahí mismo (como cuentan todos los ex jugadores).

Cavenaghi y el Chori se mandaron una en La Plata pero Ponzio estuvo atento al finalizar el partido para que estuvieran juntos en el festejo y luego salieron juntos en el micro (ayudó mucho que son amigos y que comparten habitación en la concentración). Así terminaron con un problema que querían inventar. Ayer, Cavenaghi y Trezeguet dieron un buen paso para terminar con la estupidez que ya se instaló en los hinchas de River Plate. 

La supuesta enemistad que necesita imponer el periodismo, se termina con goles en los partidos pero mientras tanto es bueno que los jugadores hagan lo mejor para el equipo.

Por Charro.