"Se pueden arreglar campeonatos enteros, como el de Boca de Ischia." Javier Ruiz árbitro "Ehhehh, eh yo pienso de que ehhehh eeeehh (?)." DAP "No estén cagados." Daniel Passarella

domingo, 3 de noviembre de 2013

¿De qué lado estás? (?)

Jugadores ninguneados o ídolos... en el medio un mundo de personas

Con la crisis y el dolor extremo que vivimos los hinchas de River Plate, es lógico que vivamos en continua efervescencia y que traslademos ese dolor a enojos y discusiones permanentes. Hace 8 años la discusión era si Aguilaucha debía o no ser reelecto, desde ese momento, ya sea por culpa de las redes sociales o por la desconfianza que tiene la gente sobre la honestidad de las discusiones, cada día se ven más agresivas e innecesarias discusiones (algo así como discusiones de entrenamiento o para despuntar el vicio por la bronca acumulada).

Una de las discusiones principales y que ha implicado el nacimiento de nuevos fundamentalistas es el concepto de bosterización del hincha, a raíz de esto, muchos han decidido odiar a aquellos que plantean alentar siempre y no quejarse y mucho menos criticar (herejía máxima). Claro que estos fundamentalistas no se limitan a criticar u ofenderse cuando les exigen eliminar la crítica, ellos asumen ser los herederos del gen millonarios y como tales, se ofenden con cada jugador que no juega o consigue los logros de sus antepasados. De más está decir que podría haber un punto medio (?) pero que ninguna de las partes lo aceptarían. Se puede alentar al equipo pero también se puede criticar, se puede exigir más a la dirigencia (traer jugadores de la calidad necesaria y no a cualquier jugador que consiguen como buen negocio) pero alentar al equipo (siempre y cuando den lo máximo, más allá de que esté muy alejado de lo que necesitamos, deseamos y debemos exigir). En mi opinión la exigencia debe ser exigida a quienes corresponde, es inútil pedirle a Rojas que gambetee a 5 jugadores y tenga explosión y desborde porque no son sus características pero puede cumplir con otras que necesita el equipo (cubrir los espacios cuando sube Vangioni o cuando el 5 es desbordado, acompañar a quien desborda por su sector, servir de pared para quien desborda...), pedirle a Carbonero que defienda o se convierta en manija de ataque es absurdo, sin embargo se le debe exigir más desborde y personalidad en los momentos complicados, y así podríamos continuar con casi todos los jugadores del plantel que son vistos como carentes de capacidad para vestir el manto sagrado y son insultados todos los partidos como si jugaran siempre mal. Para mi hay muchísima diferencia entre un jugador que da lo máximo que tiene (pero que para River Plate no alcanza) y otro que juega mal porque da menos de lo que puede. De ambos podría decirse que jugaron mal pero en el primer caso es cualpa de la dirigencia (y/o DT) y en el otro el culpable principal es el jugador.

Esta es la madre de todas las discusiones actuales pero detrás de ella hay otras llenas de intolerancia y extremismos. La mayor de todas está alrededor de Almeyda (a quienes algunos consideran el símbolo del descenso y otros como el símbolo del amor a la camiseta). No hay puntos medios, no puede existir el agradecimiento por todo lo bueno que dio ni se puede ser crítico de sus muchos errores, no se pueden plantear sus muchos aciertos (el ascenso marca que obviamente los tuvo) ni sus muchos errores (su inexperiencia marca que seguro los hubo). Tan loca es la situación que surge el término las viudas de...

Una situación similar se plantea con Trezeguet, quien, para algunos es el mismo goleador de hace 15 años y para otros, falta poco para que digan que es un jugador que solo convierte algunos goles en la B. Los primeros carecen de la crítica para ver que es un jugador sin la explosión y el ritmo de otro tiempo (fundamental para este tipo de goleadores) y los segundos no pueden ver la calidad indiscutible que tiene. Los primeros no pueden ver que ya no es el delantero que te gana un campeonato (aunque bien que te ayuda y nosotros lo experimentamos) y los segundos no son capaces de disfrutar su talento y los goles exquisitos que nos regaló. El hambre es tan grande por endiosar o destruir a un jugador, que a la lista obviamente ya se sumó Teo.

La discusión puede sumarse a Ramón (para algunos indiscutible por los títulos obtenidos y por su forma de hablar del club y para otros es un vende humo menos respetable que Caruso Lombardi) y hasta al Beto Alonso (?) (muchos ven solo al jugador endiosado y aceptarían que se convierta en presidente, para otros, en su mayoría quienes no lo disfrutaron como jugador, cometen la herejía de confundir y limitarse a ver al actual declarante sin ver al jugador que tantas alegrías nos regaló).

Las discusiones pueden ser interminables y son más entendibles cuando se habla del sentimiento por River Plate, sin embargo no logro entender cuando se antepone a un jugador/DT/dirigente a la institución. River Plate está por encima de todos porque todos formamos River Plate, hay personas fundamentales que han puesto un gran grano de arena para el engrandecimiento (incluidos aquellos que nos dieron el ascenso, título que se quiere ningunear como si, quienes lo obtuvieron fueran unos apátridas que no merecen reconocimiento) del club y muchos han dado todo lo que tienen. Ojalá pronto aparezcan los grandes éxitos y los jugadores con talento que armen otros extraordinarios palnteles para recordar y disfrutar, mientras tanto parece que habrá que seguir con las discusiones estériles (?).

Por Charro.

3 comentarios:

SERGIO dijo...

Como siempre, excelente CHARRO.

Enrique dijo...

Charro, este equipo te las hace fácil, se los putea a todos (salvo a barovero y alguna que otra excepción), pasando por el cuerpo técnico (haciendo hincapié en emiliano) y terminando por el presidente y la comisión.

Gustavo dijo...

Enrique, Gracias por el dato sobre la venta de entradas para el partido del Miércoles. Consulto, lo queda en venta se consigue por ventanilla en el estadio?, sabés en que horario?. Desde ya Muchas Gracias por cualquier información.
Un Abrazo,

Gustavo desde Neuquén