¿Castigos igualitarios?

Algunos piensan que todo hecho debe ser castigado con saña sin importar lo sucedido

El nivel del periodismo suele ser patético y cuando tratan el tema de la violencia se hace más notorio. Cada vez que hay un nuevo hecho se pide un castigo ejemplar y pocos evalúan los hechos, las comparaciones suelen ser cuantas fechas se les dio a otro equipo sin pensar en las circunstancias, reacciones y complicidades que atenúan o acentúan un hecho sobre otro.

El caso que más se asemeja al de River Plate es el caso de Colón cuando un plateísta golpeó con un encendedor al juez de línea y fue atrapado por otro plateísta que lo entregó a la policía (digamos que hasta se podría considerar menor porque hablamos de encendedor y automáticamente entregado a las autoridades). En ambos casos no hay complicidades dirigenciales, se cumplen con las normas de seguridad (la policía arma un dispositivo y la seguridad privada impide que la gente se acerque), es un hecho aislado e imposible de impedir, se entrega al culpable para ser juzgado... ¿qué más puede hacer el club? ¿por qué debemos ser castigados todos los hinchas, jugadores por un violento? ¿por qué se debe castigar económicamente a un club que hace todos los esfuerzos que se le piden para mantener la seguridad? ¿por qué no va a haber diferencia con hechos de mayor gravedad (no en cuanto al resultado del golpe sino a las complicidades)? 

Cuando veo este hecho me pregunto que se debe hacer cuando el club apaña al agresor (el caso en la bombostera cuando el hijo de un importante dirigente golpeó con un cartel de publicidad a un jugador de CAI) o cuando el agresor está en una zona no permitida (como nos pasó en cancha de Chicago cuando los dirigentes abrieron una puerta que comunicaba con la zona de vestuario, algo similar a lo que pasó en cancha de CASLA); ni hablar cuando el agresor es un empleado del club (caso el DT bostero y el empleado que escupieron a un jugador mexicano en una Libertadores) que está en una zona que no corresponde.

No suele haber intención de cambiar el comportamiento sino de dejar huella

La maldita manía de castigar a todos, especialmente a los grandes porque siempre tienen coronita (?), lleva a que se cometan más injusticias (recuerdo que se pedía que River Plate tuviera el mismo castigo que Almirante Brown por el descenso cuando un hecho no tenía nada que ver con el otro y nadie mencionaba que Central destruyó una ciudad entera cuando descendió y no tuvo ni siquiera una fecha de suspensión). A la hora de castigar son tan ridículos los castigos que ya no cumplen con ninguna lógica y mucho menos con un castigo aleccionador. ¿Clausurar un estadio o una tribuna que función cumple? Castigar económicamente a un club y perjudicar a los hinchas que nada tuvieron que ver. ¿Se los acusa y culpa por tener la misma pasión y compartir la tribuna con un violento? El castigo puede ser aleccionador para una dirigencia cómplice pero no para una dirigencia que demuestra intención de resolver el problema y demuestra cumplir con los requisitos solicitados para tener el espectáculo más seguro posible.

En este mundo al revés pretenden que sea más grave besar una camiseta que cargar a todo un estadio por un descenso, que sea lo mismo una bandera que sobrepasa cierta medida a que una dirigencia se preste a todo un espectáculo y cargada porque su rival se fue al descenso, que un hincha mate a otro por un problema barrial ajeno al fútbol a que una barra mate en la tribuna a una persona por un tema de entradas y luego lo esconda en instalaciones del club (abriendo el lugar con su correspondiente llave), es más grave un cántico a que un club deje morir a un hincha del equipo rival porque no lo quieren atender y es más grave mostrar una camiseta de aliento a un ser querido que destruir a un jugador con una falta alevosa.

Así como todos pedimos que el castigo al hincha que tiró la madera sea ejemplar, más debe serlo para quienes robaron los clubes argentinos y quienes cometen actos violentos en forma organizada (muy diferente a lo que pasó esta vez en el Monumental). De la misma forma deberían ser muy diferentes los castigos para clubes que intentan terminar con la violencia a aquellos que ayudan a los violentos (porque si no siempre estaríamos presos de los violentos que podrían hacer cualquier desmán y chantajear a la dirigencia que intente combatirlos, como pasó en cierto momento en CAI y ELP).

En medio de toda esta locura, la nueva administración ha demostrado moverse con mejor cintura que la anterior y ha conseguido que solo se suspenda una tribuna (?) en lugar de todo el estadio (aunque han exigido algunas cosas complicadas como cambiar todas las butacas de las plateas medias y bajas). No se si ha conseguido que entendieran la preocupación por revertir los hechos o si simplemente se han hecho respetar (?), pero agradezco que no hayan impedido que miles de hinchas que pagamos la entrada previamente (gracias al nuevo canje pago) podamos ver un partido de fútbol. 

Por Charro.