largo camino de espinas

No hay caminos mágicos, sólo queda esforzarse

Esta semana escuché varias veces la frase “estamos meados por una manada de mamuts”. Teniendo en cuenta el posteo sobre la importancia de los primeros 100 días y la muy interesante postura en los comentarios del Sr River Plate, quiero seguir con el tema.

Yo soy de los que creen que cuando se está de malas, siguen las malas; una cosa lleva a la otra y así viene la seguidilla (que una vez duró 17 años y esta vez espero que solo hayan sido 8, aunque fueron más dañinas). Para mi no hay casualidades, es solo cuestión de romper la cadena de eventos (que otros pueden llamar “maleficio”) que van formando la espiral descendente. Así como es muy difícil vencer a un equipo que se cree invencible, es muy difícil salir de las malas cuando se ve una continuidad de cosas malas y uno se mantiene dentro del círculo maléfico. Algunas cosas pueden ser impredecibles y otras cosas serán una consecuencia lógica de los errores cometidos pero en ningún caso uno estará preparado para reaccionar correctamente ante la adversidad, solo el trabajo arduo puede sacarnos del desastroso camino tomado por la anterior administración. Fueron 8 años de caída estrepitosa en todos los ámbitos institucionales, económicos, morales y deportivos. Sobrevivimos porque esto es River Plate.

Para algunos desprevenidos y para quienes piensan que cualquier persona elegida democráticamente tiene el poder ilimitado hasta terminar su mandato, tal vez piensen que Passarella está exagerando la crisis que vive River, pero quienes estamos en el club y nos interesamos por lo que pasa, sabíamos hace varios meses los problemas que se avecinaban.

Tal vez, verlos y escucharlos a todos los números y problemas juntos, nos haga más concientes de la magnitud pero en este blog estamos mencionando los problemas económicos y financieros desde hace más de medio año. Una vez fue para pagar sueldos, otra para pagar aguinaldos de junio, otra se dejaba de pagar los dispenser de agua, se cerraban puertas para no pagar tanta seguridad, se daba comida chatarra a los chicos... íbamos escuchando como se usaba la plata por recitales del 2010, partidos de verano, confiscación de la cuota social por parte del banco Credicoop, pago anticipado por la camiseta, patido en Bolivia (que luego se suspendió), se le cedió un lugar en el museo a Adidas a cambio de algún dinero, entrega de porcentaje de jugadores…

Ante estos hechos, ¿cual es la consecuencia lógica? Los ingresos de dinero llegan con el fútbol y hasta febrero no hay partidos, lisa y llanamente, no hay ingresos en diciembre y enero. El nuevo presidente debía entrar con mucha plata fresca para pagar aguinaldos y sueldos de más de mil empleados, pagar una pretemporada y los refuerzos urgentes e indispensables del plantel de fútbol. Con esta perspectiva, resultó lógico que muchos se agruparan atrás de los mismos que organizaron este desastre pero que venían con la “solución”. La solución la pintaron de billetes sin importar que se haría a cambio de esos dólares salvadores, hoy estamos desesperados y todo parece bien si nos saca de la desesperación de ver la tabla de los promedios y los malos partidos de los domingos.

El socio de River decidió que ese no era el camino, ahora solo nos falta entender que no hay soluciones mágicas y que el camino de la recuperación es muy largo y sinuoso. Vamos a tener que cargar las espinas (no alcanzó con cargar la aguilaucha) porque no será de extrañar que sigamos encontrando escollos en el camino y maldiciones inesperadas que serán duros golpes para los corazones doloridos. Traer un refuerzo de categoría hoy es una hazaña y una muestra de ingenio y al mismo tiempo, lo que le pasó a Buonanotte es un duro golpe que tendrá que servir para unirnos en el dolor y resurgir como el ave fénix..

No es tiempo para vivir momentos bochornosos como los que sucedieron al terminar las elecciones, donde solo se oían cantos agresivos, divisorios y absurdos, es tiempo de encontrar coincidencias y buscar realmente el bien común, que es el bien de River. Es tiempo de mostrar grandeza y hacer a un lado a los seguidores del odio y del personalismo dañino. Es hora de dejar de actuar irracionalmente y pretender que River se siga desangrando con tal de avanzar políticamente dentro del club, hay que buscar una dirigencia austera e inteligente y oposición integral y equilibrada que puedan dar por resultado una administración que levante a River.

Acercándonos a año nuevo, es un buen momento para replanteos y para dejar de lado las ambiciones destructivas. La discusión política debiera ser como se hacen las cosas, quien las hace y que se prioriza a la hora de obtener los objetivos que todos queremos. Que se hará y que se quiere, debieran ser cuestiones apoyadas por todos y hasta consensuadas. Ojalá estas elecciones le hayan enseñado a todos los dirigentes que no se puede robar sin pagar un costo, no se pueden gastar millones en una campaña y pretender ganar solo con eso. Hoy hay que ser ingenioso, comprometido y actuar en equipo para sacar a este gigante del pozo donde nos dejaron. Hoy es el momento para estar todos juntos y atentos.

Por Charro.