"Se pueden arreglar campeonatos enteros, como el de Boca de Ischia." Javier Ruiz árbitro "Ehhehh, eh yo pienso de que ehhehh eeeehh (?)." DAP "No estén cagados." Daniel Passarella

jueves, 14 de marzo de 2013

Se mantiene el negocio?

Mientras siga floreciendo el negocio en los bolsillos de los que toman decisiones, nada cambiará

Desde la aparición de la TV pareciera que el público dejó de ser importante, el público es meramente decorativo de la TV o para jactarse del espectáculo que brindan (de algo debe ¨agarrarse¨ la TV para diferenciarse de mejores espectáculos futbolísticos, campeonatos mejor organizados y para justificar que la paridad de nuestro fútbol se debe al horrendo nivel que presenta). Hace 20 años la preocupación era llenar las canchas, hoy es impedir que la gente llene estadios y ocultar las tribunas vacías. Hace 35 años en un equipo estaban Alonso, DAP, Fillol, Luque, Pedro Gonzalez, Sabella y tantos otros gigantes en otro estaban Bochini, Bertoni, Trossero, Larrossa, Outes... en otro Maradona... en otro Gati, Suñé, Mastrángelo... Villa, Houseman, Fischer, Marangoni, Gallego... todos jugadores que marcaron época e historia en sus clubes, hoy, debemos agradecer si un jugador de categoría vuelve por 6 meses o un año (Scocco, Gago, Iturbe, Ustari) o si surge un jugador que se logrará aguantar unos 30 partidos y que luego hará historia en Europa (caso Higuaín, Lamela, Falcao). Con un espectáculo tan decaído y pesimamente organizado (un partido puede cambiarse de horario y fecha hasta 72 o 48 horas antes de iniciarse), uno pensaría que se intenta no perder un centavo.

Lamentablemente no es así. Canchas como las de Velez, Lanus, Arsenal, AAAJ y tantos otros lucen vacías semana tras semana y se dan el lujo de permitir el ingreso de 3 mil visitantes. Cuál es la lógica? El negocio de la reventa es el principal detrás de otros que ni siquiera conocemos (entre los que se puede incluir las ¨comisiones¨ que le deja la barra a las comisarías, los monstruosos e inflados operativos policiales que hacen casi inviable el negocio del fútbol para los clubes). El negocio se mantiene en el dinero que se va perdiendo en los bolsillos de quienes toman las decisiones, no hay otra explicación para que todo siga igual con pequeños cambios de maquillaje.

Las cámaras para descubrir a los violentos solo sirvió como excusa para aumentar el precio de las entradas pero no metió en la cárcel a nadie. Permitir banderas de 2x1 metro sólo sirvió para cobrarle multa a los clubes. El canje para identificar a quienes cometen actos violentos (?) solo sirvió para aumentar el negocio de la reventa. No impedir el ingreso de los violentos sólo sirvió para que se agigantaran los operativos policiales y para justificar cualquier acto violento y vandálico de la policía (que muchas veces actúa peor que los barras. Los detectores de alcoholemia sirvieron para distraer policías y la colocación de computadoras con los antecedentes policiales solo sirve para mostrar que algo se hace cuando no se hace nada. AFA plus servirá nuevamente para aumentar los precios y para molestar a los hinchas genuinos pero permitirá que los violentos sigan entrando porque casualmente harán su ingreso por otros lados (como pasa con todos los otros sistemas).
 Para algunos, el ¨todo pasa¨ es una buena solución, para nosotros no hay tiempo de espera...

Ayer la AFA decidió nuevamente hacer un ¨cambio¨, un nuevo sistema de ¨castigos¨ pero sin ninguna prevención efectiva. Finalmente los visitantes podrán seguir yendo limitadamente (a River Plate le permitirán llevar menos de 3 mil hinchas a Rosario) pero quien cometa disturbios será suspendido (?). El negocio de reventa crece a pasos tan agigantados que el domingo pasado en la esquina de Udaondo y Libertador había una persona con una libreta y una birome anotando la cantidad que quería la mucha gente amontonada a su alrededor (supongo que después traería todas las entradas, deben ser tantas que ya no quieren tenerlas todas encima). Los autos por estacionar son tantos que los trapitos llegan hasta las vías del Mitre y Ciudad Universitaria es una mina de oro (incluso Tiro Federal y Obras ceden sus instalaciones para beneficiarse). El negocio es tan lucrativo que una excelente nota de Fernandez Moores en Cancha Llena nos muestra que la violencia avanza en todos los países (y varios conocedores de nuestro ¨modelo¨ ya están esperando las guerras internas).

Está claro que se seguirá escribiendo sobre la violencia y los negocios sucios alrededor del fútbol (que, según periodistas, masoquistas y todos los que son parte del negocio, los hinchas somos los únicos culpables finales por votar a estos dirigentes y permitirles que hagan estas cosas). Está claro que para terminar con esto se necesita una decisión política y judicial que nunca llega (cuantas cosas hay en juego para que nadie lo haya cambiado y se permitiera el efecto de la bola de nieve). Está claro que los hinchas somos quienes seguimos sufriendo los atropellos y por ello nos seguimos quejando aunque caiga en saco roto. Está claro cuando se intentará frenar este desmadre... cuando suceda una masacre contra gente inocente, todos lloremos con indignación y haya un costo político que nadie querrá asumir.

Por Charro.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Se mantienen todos los negocios con los barras como los negocios turbios de la guita de la TV...yo deseaba que el FPT pusiera un poco de transparencia al manejo monetario de la AFA, pero lamentablemente mis malos presentimientos se van cumpliendo...no se puede esperar ninguna mejora, nadie está interesado en eso, ni los políticos ni los dirigentes.

Saludos
Aledb

Anónimo dijo...

Aleb: Como vas a depositar esperanzas en quien mandó a River al nacional B para agrandar el calendario de partidos a trasmitir con el objeto de inducir un pensamiento único a través de un hipodermico sistema de propaganda. Como vas a depositar esperanzas en FPT que fogoneó a los violentos premiandolos con un viaje al mundial bajao el amparo juridico de Hinchadas Unidas Argentinas y para colmo, haciendose los inocentes, hablaban del folklore y pasión pero jamás de delincuencia. Además los periodistas al estar alineados en ese negocio que no quieren perder hablan de la violencia como si fueran problemas puntuales en vez de algo estructural fogoneado y amaprado desde el poder.
Francisco Segundo